11.2 Pasado

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Atlanta, 07 de julio del 2015:

Rush:

—Rush.—Megan chasquea los dedos frente a mí, parpadeo quitando la mirada de la rubia de grandes senos y miro a mi hermanita.

Megan tiene un rostro enojado.

—¿Qué?

—Eso quiero saber yo ¿Qué estás haciendo?.—Me suelta con el ceño fruncido.

—Solo intento ser amable.—Responde llevando la copa a mis labios, otra vez miro a la rubia, quien me da una clara señal de querer más que miradas conmigo.

—Sonreírle a una chica como lo estabas haciendo, no es ser amable y menos cuando tu novia está aquí. Deja de ser infiel.

—Relájate, Megan. Ya dije que solo intento ser amable al saludar a las invitadas de nuestro padre.—Le respondo enseguida.—Quiero a Claire. No le estoy siendo infiel.

—Cuando te quedas viendo con cara de idiota a otra mujer que no es tu novia...

—Ahí viene, guarda silencio...

Claire regresa al salón y llega hasta nosotros, mi mirada recorre ese hermoso vestido rojo que lleva puesto, se ve tan perfecta en una mujer perfecta como ella.

Una sonrisa cruza mis labios, tengo tanta suerte de que sea mía.

Le rodeo la cintura con los brazos, toda mi atención en esas mujeres se pierde cuando ella llega.

—Hola.

—¿Me extrañaste?.—Pregunto acercándose a mí.

—Solo fui al baño, Rush.

—Iugg..—Nos interrumpe Megan.—Esto es asqueroso.

Claire se ríe.

—¿Lo romántico?

—Acostumbrarme a que tú y me hermano están juntos, Claire.—Le aclara Megan.

—Pues acostúmbrate.—Respondo yo.—No voy a dejarla ir jamás.

Las mejillas de mi novia se tornan rojas, sonrio .

—Y si me disculpas, iremos a visitar mi vieja habitación.—Tiro de la mano de Claire y ella se ríe.

Detrás de mí, escucho a Megan decir.—Eres asqueroso, Rush.






(***)






Rush...

Me fascina oírla, me la pone más dura.

—Eso, Claire... gime para mi.—Pido apretando sus manos contra el colchón, nuestros dedos se entrelazan.

Saco mi erección y se la vuelvo a meter de golpe, ella me regala otro gemido, mi mano viaja a su muslo y lo aprieto contra mi cadera.

Dios mío, Rush...—Sus uñas se clavan en mi piel, cuando sus manos ya no pueden sostenerse de mi piel sudorosa.

Atrapo sus labios y me muevo, frotando mi torso contra su pecho, gruño excitado, encantado por el sexo que me da mi novia.

—Rush...

—Me encanta...

Me da la vuelta y termina encima de mí, pero no me quedo quieto, me siento con ella, apretando sus muslos, logrando que mi polla llegue más hondo.

Ella gime, con mis manos en su nuca, la aprieto contra mí y su boca contra mis labios.

—Te quiero, Claire.—Le prometo.

Sus ojos se ven brillantes y sus latidos me llegan a los oídos, hermosos latidos de su corazón y que yo ocasiono, me hacen sonreír.

—Yo también te quiero, Rush.—Mi sonrisa no podía ser más grande ahora.








(***)









Me abrocho la camisa, mientras observo a mi novia subirse las bragas, luego hacerlo con el vestido, Claire me mira con una sonrisa.

—¿Me ayudas?.—Pregunta desde la cama, dándome la espalda y mostrándome la desnudez de esta.

Acabo con los últimos botones y llego hasta ella, me siento detrás y subo mis manos a su espalda, acaricio su piel y ella se estremece.

Le subo el cierre y le doy un corto beso en el cuello, a lo que reacciona estremeciéndose.

—Eres tan hermosa.

Ella se gira hacia mí.

—No sé cómo sentirme de haberlo hecho aquí, mientras toda tu familia está abajo celebrando un logro de tu padre.

—Es mi habitación ¿No? Y estoy con la mujer que quiero.

Sus mejillas se acaloran otra vez.

—La única mujer de mi vida.

—Eso es ir muy serio, Rush.

Arqueo una ceja.—¿Sería tan malo?

—No he dicho eso, pero creo que debes escoger muy bien tus siguientes palabras.—Me dice con una sonrisa.

La quiero.

Y si me veo con una mujer casado y a mi lado por siempre, en mi mente solo aparece Claire.

—Hablo en serio, quiero eso contigo.

Su sonrisa crece.

—Claire...—Mi corazón se acelera.—¿Quieres casa...

Me detengo al escuchar ruidos en el primer piso, tanto ella como yo salimos de la habitación.

Y el peor escenario que esperaba, sucede en esta noche tan importante para mi padre, porque el acaba de descubrir a Megan y Oscar.


El Dilema de Rush & ClaireDonde viven las historias. Descúbrelo ahora