El cordero

Prologo

Los personajes de Naruto, no me pertenecen, yo solo los uso para escribir esta historia sin fines de lucro.

Crecieron juntos, en un mundo lleno de corrupción, amparados por los contactos, comprados en las autoridades, que también recibían una jugosa tajada, por permanecer en silencio y dejando que esas dos familias hicieran sus negocios por debajo del ojo público, ya que ante todas las personas intachables, ellos eran de las familias más respetadas de Konoha.

Indra Otsutsuki y Madara Uchiha, los recién nombrados, jefes del negocio, tenían una amistad, desde mucho tiempo atrás, se podía decir, que para antes de nacer, su destino estaba marcado, como los primogénitos de cada familia. Juntos hicieron que el negocio creciera, convirtiéndose así, en la organización delictiva más temida.

Ambos azabaches, contaban con una poderosa descendencia familiar, que se encargaba de respaldarlos en cualquier decisión que se aventuraran a tomar.

Madara, contaba también con una gran pieza en ese partido, su también amigo de la infancia, Hashirama Senju, el cuál pertenecía a una descendencia de oficiales de la ley, siendo así, una de las personas que mas los ayudaba, a cubrir, los cabos sueltos que pudieran dejar atrás.

Todo marchaba sobre ruedas, como siempre, hasta el fatídico día en que Mikoto Uchiha, la hermana mayor de Madara, solicitó los servicios de una recomendada maestra de piano.

Los dos amigos, quedaron deslumbrados ante la presencia de tan refinada y hermosa dama. Comenzando, una desenfrenada competencia entre ambos, para tratar de ganar el corazón de la pianista.

Poco a poco, los celos se hicieron mas fuertes, a tal grado de desatender los negocios, para seguir en la competencia, incluso uno de ellos, colocó al otro en emboscadas con sus competidores, esperando que no saliera con vida.

El enorme imperio, comenzó a derrumbarse y los nuevos, rivales se separaron formando cada uno su propio bando.

Lo que resultaba mas irónico, fue que tras separarse por celos y las traiciones, ninguno de los dos, pudo ganar el corazón de la dama, pues ella ya tenía dueño, su esposo y padre de su pequeña hija.

Los ex amigos quedaron derrotados y sin poder hacer nada, mas que resignarse a perder. Uno de ellos, aceptó con dolor la pérdida, pues la quería tanto que prefirió saberla feliz con su familia, pero el otro, no quizo resignarse y decidió que la tendría a cualquier precio, sin importar a cuantas personas, se tuviera que llevar de por delante, desatando, el caos y la desgracia.

[...]

—Busquen sobrevivientes—les ordenó el azabache a sus hombros, a punto del quiebre por la incertidumbre, sobre la suerte de la mujer que amaba y que dejó tranquila, para que fuera feliz.

—Los guardias y los empleados están muertos—declaró uno de sus hombres.

—Continuen buscando, yo ire adentro de la mansión—corrió adentro, con la esperanza, que ella hubiera podido escapar, pero al entrar en la casa, la situación era igual, que lo era afuera.

Grito su nombre, sin obtener su respuesta, hasta que un murmullo, lo hizo entrar en una recámara infantil decorada con paredes lilas y sábanas en colores pasteles.

—¡Señor...! ¿Me puede ayudar? Mi mamá no despierta—el cuadro fue deprimente. Era obvio que la madre, murió tratando de ocultar a su hija, la cual parecía ser la única con vida. Con lágrimas en los ojos comprobó, que su amada, no tenía pulso y que la niña, se aferraba a ella llorando en silencio.

El azabache se colocó Justo a la altura de la pequeña—¿Como te llamas?—le preguntó, con suavidad al mismo tiempo, que la alejaba del cuerpo sin vida de la madre.

—H-Hinata Hyuga—respondió, haciéndole una reverencia, al igual que lo hacía su madre, cuando la conocieron.

—Vamos Hinata, te llevaré a mi casa, para que juegues con mis perros, mientras tu mamá descansa—sin esperar la respuesta, la alzo en brazos y la tapo con una manta, para que no mirara todo lo que había pasado en ese lugar. Ni siquiera se podía imaginar, el miedo que tuvo que pasar esa criatura, viendo morir a su madre.

Continuara.

Espero que les guste, el adelanto. Se que no debo, subir mas historias, hasta que adelante las que ya tengo, pero otra vez, no me pude aguantar.