Capítulo 9

730 46 5
                                        

Mason.

No me canso. No me cansaría jamás de verla dormir. Me da algo de envidida ya que yo no puedo pero a la vez me gusta. Verla así, tan sumisa, tan vulnerable. Tan indefensa. Muero por pasar mis manos por su rostro, su cabello, sus piernas, su abdomen. Incluso por su feminidad. Pero gracias al idiota de James, su sueño ya no es tan profundo, así que si la tocaba, corría el riesgo de que se levantara. Mueve su cabeza a la izquierda y la veo. La cicatriz que James le dejo de la primera vez que la mordió. Debió de haber sentido mucho dolor.

Aunque ella cree que estoy loco al decir que daría hasta mi vida por ella. Porque piensa que nos conocemos apenas hace una semana. Lo que ella no sabe es que a conozco hace más de 50 años. ¿Por qué? ¿Por qué tenía que mudarse a Nueva York? He estado huyendo tanto tiempo del deseo de encontrarla. De acercarme a ella. No soy bueno para ella y ella tampoco es buena para mí. Debería irme. Alejarme de nuevo para evitar que la encuentren. Pero no puedo. Ya la tengo cerca y ahora no podré alejarme. Sé que es egoísta, pero sé que si me voy no tendrá a nadie. Y también sé que en el fondo, muy en el fondo ella siente algo por mí.

Saco mi camára y ajusto el lente. Listo. Una foto más para mi colección. Me la he pasado fotogranfiándola dormida por mucho tiempo. Y también desde lejos. Pero siempre me decía a mi mismo que debía manternerme lejos. La orden me mando a buscarla hace tanto tiempo que espero que hayan olvidado dónde estoy. Ya que si lo saben, también sabrán dónde está Jessica.

-Mason...-Musita ella pero aún duerme. Seguro estaba soñando conmigo.

-Ayúdame...-vuelve a musitar.

Jessica.

Corría, corría lo más rápido que podía. Pero no sabía porqué, no sabía si de algo o de alguien. Empujaba rama tras rama para poder facilitar el paso. Al final del camino veía a Mason que corría hacia mí pero mientras más corría más largo se hacía el camino y nunca podía llegar hasta mí. Ni yo hasta a él. Él gritaba mi nombre una y otra vez y yo gritaba el suyo. No podía alcanzarlo y él no podía ayudarme, seguía corriendo pero no sé hacía dónde. Mason ya no estaba. Se había ido. Y las personas que me seguían me atraparon. No forcejee, ya no valía la pena correr.

«Despierta, es sólo un sueño» dijo alguien en mi cabeza. Definitavemente fue Mason, su voz es única.

Me desperté sobresaltada. Sin Mason, no podía tenerlo...cerré mis ojos con fuerza y al abrirlos vi a Mason arrodillado a mi lado. No sé en que momento había tomado mi mano, pero yo también le estaba apretando la mano con fuerza. La solté de inmediato.

-¿Qué haces aquí?--le pregunté sentándome en mi cama y colocando mis manos atrás para apoyarme.

-Pues...dijiste mi nombre.

No mentía. Seguro por el sueño habría gritado su nombre sin darme cuenta.

Me levanté de la cama y me dirigí hasta la cocina para preparme una taza de té. Desde que soy semi-divida lo comida ya no tiene tanto sabor como antes. pero de todos modos sentía que lo necesitaba.

Mientras hacía el té noté que Mason se quedaba ahí de pie mirándome.

-Ya puedes irte.

-¿Me estás hechando?-preguntó riendose.

-Puedes quedarte pero, no me mires. Me pones incómoda.

-¿Puedo fotografiarte, entonces?-me preguntó mostrándome una cámara profesional con un lente enorme.

-¿Crees que si no quiero que me mires voy a querer que me fotografies?

Parece que no le tomó importancia a lo que dije porque ni bien me di vuelta para echar azúcar a mi té. Escuché el flash de su cámara. Me volví y volvió a tomarme otra fotografía.

-Espero que sean las únicas fotos que tienes de mí.

No respondió.

-Los divididos son mortales, tú ya no. Parece que el veneno de James es uno de los más fuertes ¿verdad?

Estúpido ¿porque tenía que sacar ese tema de la nada? detesto recordalo y más aún cuando todavía tengo la marca de dientes de James en mi cuello.

-Sí, Mason. Sólo imagínate. Si yo ya era mitad vampiro y encima un engendrador tan poderoso como James me mordió ¿Que efectos pudo haberle causado a mi sistema nervioso?¡Sí! ¡Colapse! ¡Colapse tanto que asesiné a mis propios padres!

Eso no tenía nada que ver con el tema, pero en serio necesitaba gritarlo.

-De todos modos, no los amaba-mentí. Amaba a mi padre. Y a mi madre bueno. la quería.

Mason no me respondió.

Fuimos juntos a la escuela. Cada uno en su moto obviamente, no dejaría que nadie se suba en mi moto mas que yo misma. Olvidé decirles que un engendrador es un vampiro que sólo puede convertir con el poder de su veneno. No asesinar. Lo sé es tan triste, así succione toda la sangre que tenga su victima lo único que hará es convertirlo en vampiro. Pero bueno lo que ahora más me interesaba era Jonathan, estaba segura de que me pediría una explicación respecto a como lo empuje con tanta fuerza. No sé que mentira voy a decirle, pero ya se me ocurrirá algo.

A primera hora me tocaba historia con Jonathan como compañero. Que suerte. Lo ignoré completamente cuando me senté junto a él. Saqué mi libro y comencé a leer.

«No contestes nada de lo que te pregunte»

Diablos, Mason deja de meterte en mi cabeza. Sé como hacer las cosas. Por cierto la compañera de Mason era Emma Mitchell, no había vuelto a hablar con ella desde que me dijo que no me enamorara de Mason.

-¿Vas a decirme?-preguntó Jonathan.

«Ignóralo.»

-¿El qué?-no me gusta que nadie me de ordenes.

-¿Cómo mierda me empujaste así? digo, pareces algo ruda, pero la fuerza con la que me empujaste no era mundana.

Me rasqué la frente y cerré el libro.

-Existen descargas de adrelanina. Tú...Mason, iba a golpearte y por eso te empuje.

-Pues eres bastante fuerte.

-Lo sé.-dije volviendo a abrir mi libro para continuar leyendo.

El tema era la segunda guerra mundial, yo la había vivido pero me interesaba saber como lo interprentaban los mortales. La mayoría de las cosas eran falsas.

~

Una vez que terminó la escuela me fui directo a una academia de danza, quería bailar algo de ballet contemporáneo para pasar el rato. Lo sé, no había comentado que era bailarina,pero soy rusa; sería un crimen hacía mi patria si no fuera gimnasta o bailaria de ballet. O al menos así lo veían en mi familia. Mi familia...familia que ya no tengo, todos murieron ¿por qué tenían que dejarme? Bueno, yo asesiné a mis padres, pero Alexsey se fue, al igual que tía Adelaida. Todos me dieron la espalda cuando se enteraron de lo que hice. Estoy segura de que si alexsey siguera vivo también lo hubiera hecho. No hay nadie de mi familia que no me odie. Aunque bueno, no es para menos.

NO ME MIRESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora