»Veintiuno«

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Taehyung dejó los dos platos con panqueques en la mesa. Nuevamente entró a la cocina y, una vez salió de ahí, dejó las dos tazas con café en la mesa también.

Se sentó y observó la pantalla de su celular, ya que éste había vibrado dando la señal de que un nuevo mensaje había llegado.

Nayeon.
Pasaré por tí y por Rosie en el auto. Los llevaré yo misma al trabajo.

Tae sonrió y simplemente envió millones de emojis de la manito con el pulgar levantado.

Alejó el móvil cuando escuchó pasos detrás suyo. Giró un poco su cuerpo, encontrándose a Rosé con los ojitos aún un poco cerrados y su cabello rubio apenas despeinado.

Tierna...

El castañito se sonrojó debido a esa palabra que había cruzado por su mente y luego le sonrió a la menor.

—Buenos días—Saludó Rosé y se sentó en la otra silla.

—Buenos días, ¿Dormiste bien?—Preguntó con preocupación y agarró la manito de la menor para después empezar a dejar leves y lentas caricias.

—Uh, si.

Luego de lo de anoche, Taehyung durante casi una hora se dedicó a darle mimos a Rosé hasta que ésta se quedase dormida.

Hablarían sobre el tema del psicólogo con tiempo y cuando ella estuviera lista, el castaño no quería presionarla para nada.

—Me alegra saber eso—Roseanne se sonrojó y bajó su mirada. Se safó, con delicadeza, del agarre de Tae y se dedicó a desayunar con tranquilidad.

Luego de algunos minutos, la puertas fue tocada dos veces. Tae se levantó y agarró la llave que se encontraba arriba de la mesita ratona del living.

—¿Quién es?—Gritó del otro lado, aunque ya podía suponer de quién se trataba.

—Im Nayeon, la diosa del Olimpo. ¡Abreme!—Tocó tres veces más la castaña y rodó los ojos al escuchar una risita del otro lado por parte de su amigo.

Nayeon entró y besó la mejilla de Taehyung, dejando una marca de labial ahí que, obviamente, se limpió con la manga de su remera.

—¡Hola Rosie!—Saludó a la menor y besó la frente de la nombrada, dejando otra marca.

Park soltó una risita y se limpió con su dedo. Se levantó de la silla para después peinarse un poco más su cabello.

Ya se encontraba cambiada y bien despierta ya que se lavó su cara con agua bien fría como Tae le había sugerido minutos antes.

—¿Ya nos vamos?—Preguntó Im. Tanto Park como Kim asintieron al unísono y salieron de la casa.

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—¡Rosie!—Baek gritó y se colocó al lado de la nombrada, que estaba sentada en la misma banca de siempre—Dentro de unos días será tu cumpleaños. ¿Piensas hacer algo?

Rosé abrió y cerró su boca, sin decir absolutamente nada. Hizo una mueca para luego rascar su nuca.

—No lo sé Baek... no me encuentro...—Carraspeó—Bien ahora para hacer algo—Byun abrió sus ojitos y asintió con una sonrisa para después despeinar la cabellera rubia de Park.

Baekhyun se alejó de Rosé y agarró una bandeja en donde se encontraban algunas órdenes.

—¿Entonces?—Minho murmuró cerca de Tae, que se encontraba un poco lejos de la rubia.

Wounds Covered [Taerosé]✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora