Querida Madre:
Hoy fui a visitarte como todos los días ,lucias hermosa y contenta por ello. He oído por ahí que tendrás un compañero de cuarto ,Eso me parece genial porque ya no quiero ver tus lagrimas caer cuando este por irme porque se que te sientes sola y triste por todo lo que te ha pasado, Siento eso cuando te miro a los ojos.
Antes de ir hacia el centro Bruce me grito, el es tan violento a veces. Lo hizo solo porque no le hice los mandados, lo detesto y mucho. Me encantaría que me defendieras de todos los maltratos.
Luego de escribir su carta bese a mi mama en la frente y me dirigí hacia afuera. Vi a un chico un poco pálido y cabello negro en el patio, el estaba solo mirando el suelo ,seguramente era algún loco.
Al llegar a mi casa me encontré con Bruce aparentemente enfadado sentado en el sillón, su mirada se concentro en mi y cada vez era mas fría .
-¿Dónde estabas? .-me dijo con un tono frio.
-Solo fui a ver a mama.-respondí algo cansada, siempre sucedía lo mismo.
-Déjame decirte una cosa niña. Aquí el que te manda soy yo, la próxima que salgas sin avisar estarás castigada. Y conmigo los castigos son peores ¿Entiendes estúpida?.- Asentí con ese nudo en la garganta que impedía que mi lagrima saliera. –Vete al cuarto.
Odiaba y aborrecía todo su maldita forma de ser, sus gritos y sus empujones llenaban mi cerebro de miedo y de rabia. Cada noche deseaba que desapareciera de mi ,tenia miedo de que me matara . el no era así , el era bueno y me ayudaba con las tareas …pero ahora todo cambio cuando cumplí diecisiete. Esto se volvió un infierno y Bruce se transformo en un Diablo.
Al dormir soñé que estaba en un lugar lleno de rosas y estaba mi madre regándolas y quitándoles la espinas. Ella se veía esplendida y sus manos sostenían un lindo cesto dorado. Yo intentaba hacer lo mismo pero me cortaba ,mis manos sangraban pero las suyas no.
Me levante a la madrugada oyendo golpes , al bajar las escaleras me encontré con Bruce rompiendo vasos y vidrios de las ventanas ,el estaba borracho y enojado …sus manos tenían sangre pero no le importaba nada y continuaba con los manotazos ,Al acercarme más sus ojos me miraron a mi como una presa para matar, comencé a llorar y gritar ..tenia miedo.
-Cállate estúpida. –se acerco y intento golpearme pero su torpe brazo golpeo contra la baranda de las escalera. Y corrí hacia la cocina y agarre el teléfono, jamás le había pasado algo como esto. – Tu padre te ordena que vengas. –Grito con fuerza y escuche sus pasos tambaleantes.
-Tu no eres mi padre. –Grite con miedo intentando desconcentrarlo y hace poder hacer llamada. Sus pasos se acercaban y el teléfono seguía con su tono. –Contesta, contesta.-Susurre. Estaba llorando como nunca llore , mis piernas temblaban mientras me sentaba detrás de la mesada para que no me viera.
-No importa, pero yo te mando.-Camino bordeando la mesada esperando encontrarme allí ,pero no se dio cuenta que estaba del otro lado escondida. Cuando por fin contesto la oficial intente hablar lo mas bajo posible.
-Hola, por favor necesito ayuda me van a matar.-comencé a llorar silenciosamente.
-Estúpida ven para acá.- se asomo y pude ver sus ojos mirándome con odio y amargura .Grite lo mas fuerte que podía y no pude escapar …llore pero su golpe callo todo lo que quería decir.

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El suicida.
Teen Fiction"Cariño, Algunos héroes no necesitan una capa o un superpoder para salvarte, algunos solo con una sonrisa y algunas palabras te pueden sacar del mismísimo infierno."