Simplemente no entendía nada de lo que me sucedía en la cabeza, por un lado la manera de Dominic de lastimarse sabiendo que es lo único que me mantiene en la tierra (obviamente mi madre también me mantenía viva, pero en estos momentos lo único que me causa es dolor y estrés.)
Los médicos trajeron a Dominic sedado y lo acostaron en su camilla. Yo solo mantenía mi vista en su cara, se veía destruido físicamente y emocionalmente. ¿Por qué el es así? ¿Hay algún motivo de su dolor?, Esas preguntas se metían en mi mente de manera intrigante. Al dejarnos solo me acerque hacia el, su muñeca estaba morada y repleta de pinchazos, tapé mi boca intentando no llorar.
_No sabes lo que significas para mi.-le susurre algo temblorosa. Tome su mano cuidadosamente y me recosté junto a el.
Querida Madre:
Sin dudas estoy segura de lo que me sucede no es solo amistad, hay algo mas dentro de mi que impide que deje a Dominic. Me gusta mucho ,hasta tal punto que creo que lo amo. Y lo se ,el amor es una mierda pero es inevitable no amarlo, es muy sensible y me encanta ese toque agresivo que tiene. Pero los cuentos de “felices por siempre” no siempre dicen la verdad del amor.
Al verlo dormir no pude soltarlo , me mantenía con cuidado abrazándolo teniendo el miedo que tal vez, qué solo talvez …el se valla para siempre.
Luego de leerle la carta a mi madre la mire dulcemente y le di un beso en su frente ,sonreí, sabía que ella estaba un poco triste por lo que me sucedía.
Salí de su cuarto y me dirigí al mío, al abrir la puerta encontré a Dominic despierto un poco mareado y se le notaba débil.
-Hola.- Sonrió levemente, le sonreí pareciendo feliz.
-¿Te sientes mejor?.- él se sentó en su camilla. Suspiro.
-Sí, ahora estoy mucho mejor.- beso mi mejilla y le sonreí un poco sonrojada.
-Tienes que descansar, pareces débil.-Estaba débil ,el lucia como la mierda ,pero se veía igual de guapo que siempre.
-Tranquila, estoy bien.- me abrazo, su abrazo eran de esos que de ninguna maneras podrías soltar, eran de esos abrazos que uno siempre necesita en los momentos difíciles. Era el mejor abrazo del mundo.
-Sé que no estás bien y por momentos intento decírtelo aunque no pueda ,pero tu me importas.- el me soltó y me miro fijamente a los ojos, unos ojos que estaban a punto de explotar de lagrimas. Lo vi a los ojos, una lagrima salía de uno de ellos. El suspiro profundo.
-Tienes que alejarte de mi, Me importas demasiado…Tu eres todo ,lo presentí desde el primer momento, eres mi locura.- Lo mire confusa y intente descifrar lo ilógico de su frase.
-No entiendo, no entiendo absolutamente nada.- el suspiro y trago en seco.
-Yo tengo unos serios problemas, no puedes pensar que me curare y seremos felices por siempre, no es todo fácil en la vida. Me importas mucho, eso significa que deberías alejarte del que posiblemente te lastime.- Mi corazón se rompió y yo solo intente detener ese nudo en mi garganta.
-Pero a mi me importas Dominic, yo estaré siempre para ti. No puedes alejarme.- quería llorar ,por que tanto egoísmo. Me fui hacia el patio, me sentía mal por todo.
Mi mente intentaba buscarle sentido a lo que me ocurría, sudaba y mi cabeza dolía. No lloraba pero estaba muda. Shockeada de alguna manera. Pase horas allí y tenia frio, estaba abrazando mis piernas temblorosamente.
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El suicida.
Teen Fiction"Cariño, Algunos héroes no necesitan una capa o un superpoder para salvarte, algunos solo con una sonrisa y algunas palabras te pueden sacar del mismísimo infierno."