"¬CAPÍTULO 58"¬

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-Mamá. Mira un perrito, lo podemos llevar ¿?. -(pregunta el pequeño).

-Cariño ya hablamos acerca de esto. -(dice la Omega).

-Pero papá dijo que podía tene.
-(es interrumpido).

-Estás conmigo, ahora entiendes.
-(lo sujeta del brazo).

-S.. Si. -(asiente con miedo).

El pequeño no podía dejar de mirar al perrito que se encontraba sentado sobre la acera, que se safa del agarre de su madre para correr hacia el perrito.

-¡Mew!. -(gritaba la mujer, que iba tras el pequeño).

Mientras que el pequeño iba tras el perrito no contó que fuera empujado y se escuchara el estruendo, entre la avenida y la gente que gritaba.

-¿Te encuentras bien pequeño?. -(pregunta la mujer que lo ayudó a levantarse).

-S..Si.. -(responde tímido).

-Llamen a una ambulancia!.
-(grita un señor).

El pequeño sin entender que pasaba, se acerca hacia el Señor viendo el cuerpo que se encontraba sobre la avenida.

-¡Mamá!. -(se arrodilla, al lado del cuerpo). -!Mamá!... Mamá!!. -(gritaba el pequeño, moviendo el cuerpo).

-Mamá... -(murmura el Alfa). -¡Mamá!. -(se levanta abrumado por tal sueño que sufría).

El rápidamente se toca el rostro que se encuentra con lágrimas traicioneras, que su mirada cae sobre el Omega que dormía plácidamente.

El Alfa se levanta de la cama, dejando al Omega descansando que sus pasos se dirigen hacia la terraza, que su mirada cae en el cielo oscuro.

-Por que ahora. -(murmura decaído).

-Mew. -(nombra el Omega que llegaba a la terraza con su vientre ya hinchado).

El Alfa al escuchar su nombre voltea, encontrándose con su Omega que se encontraba somñoliento y preocupado a través de su mirada.

-¿Qué haces despierto?. -(pregunta el Alfa, cubriendo al Omega con una sabana alrededor de su cuerpo).

-Mew. -(toma del rostro al Alfa).

-Si. -(observa fijamente al Omega).

-¿Qué tienes?. -(pregunta preocupado).

-No tengo nada. -(sonríe el Alfa).

-Te conozco y se que algo no está bien. -(responde serio el Omega). -O es que no confías en mi. -(dice el Omega dolido).

-No es eso, solo que. -(se detiene al ver como caían pequeños rastros de lágrimas en el rostro del Omega).
-No llores amor. -(limpia las lágrimas del Omega).

-Como quieres que no llore, cuando ni siquiera puedes confiar en mí.
-(reclama el Omega, golpeando el pecho del Alfa).

-Solo olvidalo. -(niega sereno).

-(frunce su ceño). -Esta bien. -(asiente decepcionado). -Te espero en la habitación. -(dice, para luego retirarse esperando que el Alfa lo detuviera, pero eso no paso).

Mew al ver que Gulf, se retiro recibió un gruñido por parte de su lobo, empezando a regañarlo.

Mientras que Gulf al sentir a su cachorro inquieto acarició esa zona, dirigiéndose ahora a la habitación de su pequeño, que al ingresar se sentó sobre el sillón mesero, disfrutando del total silencio que se encontraba la habitación.

!No Te Enamores De Mí¡ Mew x Gulf Donde viven las historias. Descúbrelo ahora