Capítulo 12 [Corregido]

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Los días comenzaron a definir las rutinas de ambos rápidamente... Para Siren era todo tipo de clases, modales, históricos, arte de la guerra, entrenamiento con la lanza y muchas cosas más que quizás no lo cansaban totalmente físicamente pero sí que lo agobiaban mentalmente y mucho, aunque sabía que debía mantenerse firme, esto no era nada a cuando tenga que tomar decisiones difíciles teniendo la corona.

Muchas de estas cosas ya lo sé ¿Por qué debo volverlas a estudiar?- cuestionó fastidiado observando el gran y viejo libro frente a él.

Tu madre solo quiere asegurarse de que te vuelvas un Rey Sabio en un futuro capaz de tomar las decisiones difícil aún bajo mucha presión

Lo se Selkie, pero me gustaría pasar más tiempo con Kappa ya tiene dos semanas y apenas lo he podido ver- Se quejó totalmente resignado y aburrido, de saber que lo pondría a estudiar, algo que ya sabia, prefería estar con el castaño.

¿Por qué tanto interés en el chico humano? Es decir, han llegado muchos de su raza y tú nunca has mostrado tanto interés, ni por alguna princesa- Cuestionó la de cabellos canos con una sonrisa en su rostro, aunque claro, esto no lo sabía él más joven, pues estaba a espaldas de esta.

... Claro que no, solo son ideas tuyas jajaj- excuso ciertamente de la peor manera posible, definitivamente Siren era como un libro abierto.

A mí no me engañas, soy lo suficientemente vieja para saber cuando me mienten y tú muy malo para mentir- Insistió sonriendo, simplemente era mejor ahorrarse tanta vuelta si de todos modos era evidente la respuesta.

No me digas eso... solo siento como si hubiera algo que me atrae a él, algo que no puedo ver ni evitar mucho menos controlar

Oh, vamos pequeño príncipe, ¿Necesita consuelo? Selkie puede consolarlo

No necesito consuelo- Gruño fastidiado cuando repentinamente le despeinaron su cabello ya de por sí rebelde.

Oh, vamos, no sea tan reservado

Estoy bien

Al menos los ratos con Selkie eran entretenidos y ya por la noche se dedicaba a arreglar su pequeña sorpresa para su querido castaño. Por otro lado los días de Kappa eran un poco más dinámicos, pues ayudaba en el restaurante como mesero.

Buenos días, Bienvenidos- Saludo, el de tez morena apenas escucho que abrieron la puerta del restaurante, aunque primero se dedicó a terminar de limpiar la mesa en turno antes de girarse a ver de quienes se trataban.

¡Hola! Hmm ¿Kappa? Creo que había escuchado al príncipe llamarle así ¿Verdad?- Al menos el rostro conocido de Skiff le animaba bastante al de ojos dorados.

Sí, si ese es mi nombre, tú te llamas ¿S...niff?- ciertamente Kappa era muy malo recordando nombres.

Skiff ¿Entonces trabajas aquí? Seguro que así será más fácil acostumbrarte a vivir por aquí- comento el guardia mientras tomaba lugar con una sonrisa amable en su rostro.

Si eso creo también, pero dime ¿Qué vas a ordenar?

Hmmm dame un momento y te digo

Bien entonces ya regreso

Y básicamente así era con cada cliente, aunque otros eran un poco más serios o tímidos, en general todos son amables o por los menos pacientes, aunque claro, el ojidorado ya tenía experiencia y le era más fácil mantener un ritmo veloz.

Gracias Kappa nos vemos en otra ocasión- se despedía Skiff una vez término de comer.

Oye antes de que te vayas... ¿Sabes quién puede enseñarme a usar la lanza? Me gustaría entrenar o hacer algo aparte en mis días libres- comento con curiosidad.

Emm bueno... puedo ayudarte con eso en mis días libres, suelo entrenar un poco yo solo para mantenerme en forma

¿En serio? Eso sí que es dedicación, por ahora debo volver al trabajo, pero si quieres después nos ponemos de acuerdo

Claro, no hay problema suerte

Gracias, nos vemos Skiff

Y al terminar el largo día de trabajo por fin podía relajarse tomando una dicha de agua caliente y cuestionándose Si hoy tendría alguna visita nocturna, aunque nunca llegó su visita deseada, al menos no durante dos semanas.

El ciclo de nuestras vidas [Castle Swimmer]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora