El ciclo de nuestras vidas [Castle Swimmer]

Capítulo 58

-Entonces… Kappa - murmuró Ciro llamando la atención de Siren y Skiff aunque este solo se limitó a observar de reojo.

-Si tienes algo que decir solo hazlo Ciro, tú también Skiff -se limitó a responder cruzándose de brazos.

-No quiero sonar mal amigo pero te recuerdo que eres un príncipe y ocupas un heredero!?
-QUE FUE ESA MIRADA!? Casi me asesinas con verme, solo cumplo con mis deberes de guardia!

Ambos se habían girado a observar a de ojos azulados con una expresión de reclamo, Siren era bastante consciente de lo hizo y lo que debería hacer en el futuro pero simplemente la idea de imaginarse una vida sin el castaño le era prácticamente imposible.

-Ya, ya, Lo se muy bien Ciro y lo siento  Skiff es solo que entrantes muy repentinamente, fue más por instinto, no volverá a suceder … apenas que entres  sin tocar de nuevo

-Buenoooo… si lo pones así estamos a mano - acepto el joven guardia un poco resignado.

-Bien, un asunto resuelto… pero más importante  es lo que te acabo de decir, no dudo que la  Reina Susca acepte a Kappa después de todo es el iluminado pero volvemos a lo mismo, un heredero o heredera, sería lindo que tuvieras una niña - murmuró la mantarraya sonriendo por lo último.

- O ambos, aunque seguro la niña sería la favorita de Siren y por supuesto yo sere el tio favorito - exclamó Skiff igual de emocionado que él más alto.

-DE ACUERDOOO… no pensemos aún tan a futuro para empezar estamos en medio de una guerra, mi novio está prácticamente a merced del enemigo, no se si lograre levantar el reino a lo que alguna vez fue y más importante, no creo que Kappa pueda tener niños y aunque así fuera no sé si él quiera así que no entremos en detalles por favor- pidió un poco tenso y avergonzado.

-Niño o niña entonces?

-Skiff…

-Es solo curiosidad,  responde tenemos la duda…

-aaag bien… niña -Respondió soltando una pequeña sonrisa  divertida.

Y aunque la tríada bajo el mar se estaba divirtiendo con conversaciones muy a futuro quien no la estaba pasando tan bien era cierto castaño de ojos dorados y tez morena, quien se encontraba realmente nervioso de que pudieran atraparlo.

Abrió el pasadizo llamando la atención de los presentes quienes comenzaron a murmurar un poco desconfiados principalmente quienes no lo conocían.

-Por favor guarden silencio no queremos llamar la atención de los guardias- Pidió Susca con calma aunque se notaba un poco ansiosa.

-Santos cielos  Kappa, ¿cómo se te ocurre venir? es peligroso que estés aquí- alegó cori en voz baja mientras el castaño sacaba las llaves.

-Trato de que nadie muera aquí, dime que conoces los pasadizos, Siren es  malo dando explicaciones

-Claro que conozco los pasadizos como la palma de mi mano

Cori realmente estaba orgullosa de conocer cada rincón del castillo, ayudar de esta forma valió cada castigo que recibió cuando se daban cuenta de sus travesuras, una vez que pudo  salir del calabozo  ayudó al castaño a bloquear la entrada con lo que encontraran para después  liberar al resto.

-Reina Susca, lamento  tardar tanto en ayudarle han sido meses complicados -murmuró el castaño un poco nervioso.

-Me alegra ver que estes bien pero y Siren? él cómo está?- pregunto ansiosa después de todo era su hijo y lo único que quedaba de su familia.

-Él está bien, se quedó con Skiff y Ciro entre otros  ahora más importante tenemos que sacar a los heridos de aquí para que los otros puedan entrar y traer las armas  que las mantarrayas han traído aparte la reina Nee dijo que recibiría a los heridos  para tratarlos

-La mayoría puede luchar solo Seko está herida de gravedad- Murmuró Susca observando a dónde se encontraba la mencionada.

-Seko, santo cielos ¿Que hiciste? Skiff se va enojar

-Hey  Kappa, Skiff puede decir misa si quiere solo cumplo con mi deber

-Vamos no seas tan modesta, te llevaremos a curar  así que tendrás que aguantar un viaje ajetreado

-No tan ajetreado como las ideas e inseguridades del príncipe Siren

-Ni te imaginas

Ambos rieron, al menos el humor de Seko continuaba intacto.

-Solo tenemos una salida rápida - susurró la mantarraya observando una puerta de metal.

-¿Que hay ahí?

-Nuestra perdición si no tenemos cuidado

- ¿En serio? Lo único que me puede llevar a mi perdición se encuentra esperando a mi regreso y su nombre es Siren

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Bueno público antes de que se acaben los datos y la batería de mi celular, que hace mucho viento y no hay luz por ende no hay wifi ... ಠಗಠ

Nos vemos