El ciclo de nuestras vidas [Castle Swimmer]

Capítulo 7 [Corregido]

—Lo mejor será ir a ver cuáles son los resultados de la prueba de Selkie- Propuso Susca comenzando a nadar a la superficie, conocía bastante bien a la mencionada y seguramente algo habrá hecho en este punto.

Siren observó a su alrededor, a pesar de ello no se percató de nada extraño y simplemente decidió seguir a su querida madre, solo ella sabía qué pasaba por su mente.

Una vez se encontraban fuera de la habitación, ambos se vieron confundidos al escuchar bastante ruido, intercambiaron una mirada confundida y ambos suspiraron sospechando sobre cualquier cosa, por lo cual la Reina abrió lentamente la puerta.

—Realmente no va a despertar pronto- Hablo Skiff que jalaba un poco brusco de los hombros al de cabellos oscuros, casi llorando de la desesperación.

—¿¡En serio no tiene algo para despertarlo!? Skiff y yo hemos hecho todo lo que se nos ha ocurrido- reclamo Seko un poco frustrada por la situación.

—Bueno, tengo una posible solución, pero quizás el chico no pueda dormir durante una semana- aseguró frotando su barbilla con su mano izquierda intentando recordar dónde había puesto ese remedio.

—¡No! no, no gracias dejemos que el chico se recupere eventualmente- Hablo algo asustado el pobre guardia que aún sostenía al bello durmiente de Kappa.

—Ejem...- Susca se había aclarado la garganta, dejando a los presentes totalmente sorprendidos.

—Emm... creo que nos llaman a nuestros deberes ¿Verdad Skiff?- cuestiono Seko sujetándolo del brazo.

—S-si tienes razón, totalmente- Aceptó dejando al de tez morena en la cama con sumo cuidado.

—Con su permiso, Reina Susca, Príncipe Siren- hablaron intentando mantener un semblante serio para después salir huyendo de la habitación.

—¿¡Eh!? - soltó el príncipe bastante confundido al ver huir a ambos guardias.

—Déjalos... de todos modos quería hablar con Selkie, ¿Y bien? ¿Cuál fue el resultado? Aunque viendo el escenario creo imaginar lo que pasó...

—Par de traidores... ¡Susca! jaja Es una historia bastante graciosa a decir verdad

—Ahórrate los cuentos ¿Funciono?

—Eg... bueno, tal vez necesito que el chico esté despierto y el incienso que use...bueno, tal vez use un poquito de más, así que no reaccionó la perla- Explico a Reina solo suspiro cansada.

El silencio se hizo presente con Selki fingiendo decepción por la situación, Susca cerrando los ojos para llevarse la mano al rostro con cierta frustración aunque ya imaginaba que algo iba a salir mal y Siren procesando que es lo que escuchaba.

—¿Perla? ¿Para qué usarías las perlas?- A grandes rasgos se podía vislumbrar una sonrisa un poco nerviosa en su rostro, a lo cual la curiosidad del joven tiburón lo llevo a acercarse al castaño, a observar el objeto en sus manos.

—Bueno hasta ahora sabemos que si uno de nuestra gente toma una perla bañada a la luz de la luna entre sus manos está cambia de color, y así dependiendo el color podemos saber más de ellos, pero en el caso de los humanos solo puede ser blanco o negro, tu madre quiere saber si podemos descifrar al chico con eso- explico animada la anciana mientras le mostraba una perla al joven príncipe.

—¿Puedo intentarlo? Me gustaría saber qué color es mi Perla - pidió animado.

—Claro, imaginé que le gustaría intentarlo, así que por eso traje otra

Siren tomo dicha gema entre sus manos esperando a que esta cambiará de color, ya que de momento la gema estaba transparente, pronto está fue tomando unos tonos entre azules y verdes, el joven príncipe parecía sorprendido, nunca había visto como estás perlas cambiaban de color.

—Ah así que esas son algunas de sus calidades, por lo general los portadores de las perlas azules tiene las cualidades de ser Honestos, confiables, responsables, intuitivos, calmados, leales, conservadores, fieles y con bastante coraje para enfrentar situaciones difíciles, en cambio, los de las perlas verdes tienden a ser equilibrados, suertudos, con un gran sentido de justicia, generosos, armónicos y bastante guapos- explicó la mayor de los presentes con bastante ánimo.

Ciertamente, Siren pose varias cualidades de estas y probablemente a lo largo de su vida irá adquiriendo otras que mencionó y muchas más, después de todo aún era muy joven y como todo ser vivo nunca se deja de crecer e ir evolucionando.

—¿En serio? Me preguntó de qué colores sería la de Kappa...

—Bueno, este chico no va a despertar hasta por lo menos en unas horas, así que lo mejor será desayunar - Propuso Selkie saliendo de la habitación.

—¿Puedo quedarme a desayunar aquí?- se atrevió a preguntar el joven.

—... Bien solo porque sé que lo harás, aunque diga que no

—N-no es cierto ¿Por qué haría eso? Ja, ja, ja

Y en efecto, su madre tenía razón, lo hubiera hecho, aunque ella dijera que no, pero es que simplemente no quería separarse de él, sentía que había algo que lo atraía, algo invisible ¿Un vínculo que no podían ver tal vez? Cuál fuera el caso se alegraba de vivir esto. de algun modo u otro.

- - - Extra - - -

—Emm... Seko

—¿Si Skiff?

Ambos guardias se encontraban frente a las puertas principales del castillo, observando la tranquilidad que los rodeaba, dejando de un lado lo sucedido con Kappa, todo ocurría con cierta normalidad y tranquilidad.

—Nos conocemos desde hace mucho ¿Verdad? Así que hay confianza entre nosotros ¿Cierto?

—Claro, después de todo somos compañeros, confío mucho en ti

—Y Sabes que también te aprecio demasiado...

—No entiendo a dónde quieres llegar

La mirada sería de Seko se posó sobre su compañero, que tenía una actitud nerviosa y hasta cierto punto temerosa, así que no entendía bien que es lo que quería exactamente.

—Cuando nos fuimos dijiste debíamos ir a hacer nuestro deber, pero en ese momento nuestro deber ¿No era vigilar al humano?

—...

—¿Seko?

—ES CIERTO ¡DESOBEDECIMOS UNA ORDEN DE NUESTRA REINA!... Nos va a castigar, seremos degradados, exiliados, deshonrados...

—... ¿No estás exagerado? ¿Seko?

Mientras la dramática guardia se mantenía en pie con ayuda de su lanza, Skiff observaba un poco desconcertado a su compañera, quizás no debió haber mencionado ese detalle...