El ciclo de nuestras vidas [Castle Swimmer]

Capítulo 76

Gracias a qué Pagoon estaba de vacaciones y Pim decidió tomar todos los días libres que nunca se había tomado fueron en busca de la tríada de brujas  donde Mucku casi vuelve a lanzarle un maléfico a Kappa.

-No volveré a caer en eso...

-Mi bruja novato favorito, muy bien hecho frustrar el maleficio de una bruja, muy malvado de tu parte

-Aprendi de la peor bruja del mundo jeje, por cierto quería decirles que pronto me casare con Siren y… bueno quiero que asistan no se exactamente que es lo que ya tengan listo pero prácticamente solo están esperando a que vuelva

- Pensábamos que no nos ibas a invitar - Interrumpió Nethimir quien iba entrando a la sala.

-¿Porqué no lo haría? Ustedes son mis tías malvadas, son importantes para mí aparte de ser prácticamente mi única familia, de todos modos tengo que regresar ya, Siren a estado al mando en algunos asunto y yo bastante tiempo ausente me preocupa que … bueno ya sabe

-Si, si lo entendemos, Mono ¿Porqué no vas con él? Ocupo a Mucku para algunas cosas y en caso de que nos retrasemos de más al menos una debería estar presente - sugirió Nethimir sin darle tanta importancia.

La mencionada asintió y pronto miro al castaño bastante animada.

-Gracias de hecho ocupo tu ayuda con un par de cosas...

En cuanto a Siren simplemente quería que la tierra se lo tragara y lo escupiera en algún otro lado, ciertamente estaba estresado aunque las preocupaciones habían disminuido con los tratos que había hecho con Nee y el resto de colonias que de encontraba con ella

Cori por otro lado una vez que hablo con Calixta y Siren principalmente entro en razón de que no debía preocuparse por su colonia si ellos no se habían preocupado por ella y sus hijos, gracias a qué estaba en el territorio de los tiburones podía empezar de cero nuevamente si así lo deseaba.

Ciro después de la regañada que le dio su esposa se disculpó con la que alguna vez fue el amor de su vida, ciertamente había actuado por impulso.

Al menos era un peso menos a su modo, el de cabellos azualdos solo deseaba que su amado volviera,le extrañaba mucho de ello no había duda alguna.

Cómo cada fin de día se dio un baño de agua fría después de todo la disfrutaba más y se dirigió a su cama totalmente resignado a qué el castaño estaría ausente otra noche.

Probablemente sería estúpido pero la incertidumbre de que el de ojos dorados decidiera retractarse y abandonarlo comenzaba a hacer acto de presencia en su mente aunque rápidamente cambiaba el pensamiento el miedo comenzaba a crecer.

-No es momento de volver a ser el Siren inseguro... Él volverá, lo prometió - Balbuceo ansioso recostandose.

Cuando menos se lo espero se encontraba amaneciendo, se sentía cansado aún comenzaba a creer que sería bueno decretar por lo menos un día libre para el a la semana y poder dormir más tiempo, repentinamente sintió un peso cálido sobre el así que abrió los ojos un poco alarmado, sin embargo no pudo dejar escapar una sonrisa de oreja a oreja a cruzar su mirada con el dueño de esos ojos dorados que tanto amaba.

-Volviste...

-Por supuesto que volví, aún hay una boda que celebrar y es la nuestra, perdón por tardar tanto - murmuró él castaño abrazando a su amado.

- ¿Encontraste lo que estabas buscando?- las manos de Siren comenzaron a recorrer el cuerpo del más bajo quien solo se dedicó a disfrutar del cariño que le daba su pareja.

-Por supuesto que lo encontré  aunque me preocupa más los pendientes que tienes, Skiff me dijo que estás como loco, te ayudaré para que no envejezcas rápido por el estrés...

-Que gracioso

-Lo sé

Ambos rieron por el sarcasmo que estaban usando, y decidieron quedarse recostados otro rato aunque Siren se quedó dormido entre los mimos del castaño.

-Siren te busca en...- Skiff quedó helado cuando Kappa le dedico una mirada asesina ¿Que clase de deja vu de mal gustó era esté? -Ya me iba …- soltó desconsertado mientras cerraba la puerta.

Quizás pasaron un par de horas cuando ambos hicieron acto de presencia, en cuanto a Ciro y Cori gracias a Calixta es que se mantenían ciertamente tranquilos dándole algo de respiro al de cabellos azulados.

-¡Mono! No pensé que vinieras también, me hubiera levantado antes de saberlo

La mencionada negó dando a tender que no debía preocuparse, entendía lo que era ser casi un Rey y era bastante agotador a su parecer.

-¿Estoy pintando o que? Yo también vine desde bastante lejos Y si no fuera por la tía Mono me hubiera ahogado, nadie me dijo que para venir aquí tenía que entrar al mar- Reclamo el más chico  presente mientras se paraba alado de la tranquila bruja.

-Pagoon, tampoco sabía que estabas aquí, me alegra mucho que también vinieras

-¿Cómo no iba a venir? Tengo que asegurar que Kappa llegue bien

Sin duda alguna Pagoon tenía una autoestima bastante alta.

-Bueno quisiera que el encuentro durará más pero hay asuntos que tengo que resolver - Murmuró Siren algo molesto

-Yo lo ayudaré para terminar más rápido, por mientras ¿Porqué no le piden a Cori o Skiff que les enseñe el lugar? -sugirio el castaño bastante animado.

-Bien pero si ocupan ayuda de personas tan geniales como nosotros no duden en decirnos- Exclamó el menor bastante animado.

Siren y Kappa se centraron en hacer los papeleos y pendientes, por su parte Susca se alegraba de que ir fin podrían terminar de planear la boda, realmente deseaba ver a su hijo convertirse en rey.

-Kappa- llamo una vez entro con los futuros gobernantes.

-¿Si reina Susca? - respondió el mencionado levantando la mirada del documento frente a él.

-Estamos en confianza solo llámame Susca ¿Podemos hablar un momento en el balcón?

-Claro ¿Me da un segundo?

La reina asintió caminando al balcón de mientras Kappa le hablaba algo a Siren sobre lo que estaba leyendo.

-Bien ahorita lo checo - aseguro el de dientes afilados.

Kappa suspiro y camino tranquilamente al balcón cerrando la única puerta que  separaba de curiosidad de Siren, pues el castaño no era hageno a las miradas "discretas" de este.

-¿Sucede algo?- pregunto el de ojos dorados acercándose a la actual gobernante.

-En realidad solo quería darte algo, escuché que en las bodas humanas las novias suelen llevar algo prestado, algo viejo y algo azul, no estaba segura si piensas aplicar lo mismo pero quería prestarte esto de cuando me case-  es un pequeño broche.

-No tenía que  molestarse

-Por favor, después de todo tendrás que aguantar a mi hijo - sonrió levantando la mirada a dónde se encontraba Siren, quien les observaba con los ojos entrecerrados intentando entender que sucedía.

-Nada que sea de tu asunto, sigue trabajando - exclamó Kappa riendo.

-No es justo

Sin embargo continúo con su trabajo.