En algún lugar del mundo se encontraba un pequeño niño de cabellera castaña oscura, piel morena y ojos dorados, jugando cerca de un lago junto con otros cuantos chicos, no era raro que se encontraran ahí, el orfanato quedaba cercas y como no tenían muchos niños solían llevarlos relativamente diario por un par de horas para que jugaran o tomaran aire fresco.
—¡Kappa! Pronto estará la comida, no te tardes- Aviso uno de los cuidadores quien daba un vistazo para asegurar que todo siguiera en orden.
—De acuerdo...
Se limitó a responder para volver a su tarea de observar fijamente el agua en espera de algo, no era la primera vez que venía y se sentía observado, simplemente quería saber que causaba esa sensación y sabía que se encontraba bajo el agua, no tenía pruebas pero tampoco dudas. Decidió subir sobre unos troncos o quizás raíces de un árbol cercano para tener una mejor vista, simplemente las ideas comenzaban a agotarse y las respuestas no llegaban.
Una vez sobre estas, se apoyó sobre una rama sin percatarse de que estaba seca, a lo que segundos después se escuchó un "Crack" a lo que segundos después supo que quizás terminaría resfriado y castigado.
—¡Demonios!
Alcanzó a decir cuando cayó dentro del lago, sabía nadar un poco, debido a que les daban clases de natación, por lo cual no entró en pánico, sin embargo, al intentar impulsarse para salir, noto que su ropa se había atorado con algo, impidiendo su regreso, ahora sí estaba asustado, con varios intentos fallidos de zafarse el oxígeno comenzaba a escasear y su vista a nublarse, sentía frío y miedo ¿Pero qué podía hacer un simple niño?
Repentinamente, sintió un tacto cálido, parecía que le ayudaba a salir, probablemente uno de los cuidadores se dio cuenta y le estaba sacando, por lo cual simplemente dejó que le auxiliarán. Cuando por fin estuvo en tierra firme pudo escupir el agua que había entrado a sus pulmones, era una sensación horrible, ahora sería mucho más cuidadoso sobre donde se subía y colocaba sus manos.
—¿Estás bien?
Escucho claramente, no era una voz conocida, así que con el poco conocimiento que le quedaba abrió los ojos encontrándose a un niño que aparentaba tener su edad, cabellos azulados, ojos azules claros y piel blanca.
—¿Quién eres?- Su mente confundida solo le permitió cuestionar al extraño que le había salvado.
—Siren
El castaño, cediendo al cansancio, levantó su mano en un intento prácticamente imposible por sujetar al extraño chico frente a él, terminando inconsciente.
—¡Kappa! ¿¡Dónde estás kappa!?
Los gritos y pasos desesperados de los cuidadores en su búsqueda se hacían cercanos con rapidez, por lo cual ese tal Siren se dio media vuelta saltando de vuelta al lago, permitiendo ver lo que parecía ser una ¿cola? ¿Era un tritón?¿Acaso había sido una ilusión?
—Espera...
Y fue cuando todo se volvió oscuro...
Cuando despertó y estaba más consciente de lo que sucedía preguntó si habían visto a alguien más con él aunque claro, nadie sabía nada al respecto, quizás todo había sido producto de su mente por mantenerlo vivo, quizás nunca lo sabría y aunque siguió volviendo al lago casi a diario, aun si tuviera que escaparse a escondidas esa sensación de que alguien le observaba había desaparecido, lo que lo desanimo, pero no aun así no desistió.
Los días se convirtieron en semanas y las semanas en meses hasta que los años comenzaron a pasar, a los 18, cuando cumplió la mayoría de edad como cualquier otro huérfano, tuvo que irse e iniciar con su propia vida, pero parecía que esta solo quería mofarse de él, probablemente tocaría suelo en cualquier momento.
Y así cuando la vida le dio la espalda decidió probar suerte en el pueblo donde había crecido, no tenía nada que perder, pues lo habían despedido de su último trabajo como cajero de un local de pizzas que contrabajos asistían los propios empleados, la señora que le rentaba un pequeño, pero acogedor cuarto le echo porque su familia se mudaría con ella, así que resignado a que no tendría dinero durante un tiempo vendió sus cosas y regresó aquel lugar, el lago.
Desde aquel extraño suceso transcurrieron 16 años, tiempo en el que la duda de si realmente había visto a ese chico era verídico, por lo cual se dedicó a mejorar en su nado, con clases que podía costearse al menos una vez a la semana y quizás un día regresaría a investigar.
—Hora de ver si eres real o no Siren...
Y así, sin quitarse alguna de sus prendas, saltó dentro del lago sorprendido de que este era mucho más chico de lo que recordaba, imposible que alguien pudiera esconderse con facilidad ahí adentro. Se acercó al fondo que solo estaban un par de metros frente a él y miró alrededor, definitivamente era un simple lago común y corriente, incluso pudo tocar el fondo aunque al hacerlo le dio unos escalofríos que recorrió todo su ser, resignado decidió volver a la superficie, pero al abrir los ojos y observar su alrededor todo había cambiado.
—¿Dónde estoy?
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El ciclo de nuestras vidas [Castle Swimmer]
Fanfic¿Destino o Casualidad? Tanto Siren y Kappa sienten una conexión bastante fuerte cuando se conocen y aunque pensaban que era mera casualidad pronto descubren que quizás no fue así. . . . Les recuerdo que el comic original lo pueden encontrar en web...