Asesino En Série/kookmin

Capitulo 28

Al minuto siguiente se sintió devastando lo suficientemente tonto, ingenuo y posiblemente el rey de los idiotas, las lágrimas seguían   bajando de sus mejillas no hacía otra cosa que atormentarse, estaba solo, seguramente aquel hombre debe estar buscándolo quizá su familia también, el realmente creía que si, la noche llegó calurosa estaba cerca de lo que parecía un pantanal una vieja cabaña en un rincón sobre la desnuda madera y una cobija era todo lo que tenía.

El coraje que en un inicio lo impulsó a esto parecía haber desaparecido, la puerta fue abierta sobresaltadose, pero cuando vió al joven que lo había rescatado bajo la guardia, este  venía con sopa instantánea y un vaso de agua.

Se lo ofreció lo tomo aún dudoso y agradeció apenas en un susurro.

- Lo siento, solo me alcanzó para esto - se sentó a un lado sonriéndole él también traía su propia sopa, los palillos se sintieron torpes en sus manos  jamás había comido con ellos, pero tan pronto como probó la sopa no se detuvo hasta acabarla al igual que el agua.
La curiosidad sobre aquel chico lo hizo dejar de lado el silencio y preguntó.

- ¿Cuál es tu nombre? - dijo mirándolo a los ojos por primera vez, tenía unos ojos bonitos.

- Soy BamBam, ¿Y tú? - pregunto de vuelta con una sonrisa, parecía de confianza así que contestó con su verdadero nombre, a estas alturas era lo mejor,  entre más personas sepan su nombre, sería para su familia más fácil encontrarlo.

- Leo, Leonardo Kaulitz - el chico lo miró y asintió - yo soy muy tonto...

- Si lo eres - afirmó mirándolo a los ojos con seriedad y un deje nostálgico - solo un tonto estaría acompañado de un hombre peligroso. - aquella afirmación lo estremeció, el realmente había estado en peligro, lo podía sentir cuando estuvo cerca del pelinegro, aquella aura dominante lo llenaba de tanto miedo.

- Lo se...yo fui muy ingenuo.

- Lo más seguro es que esta tras de tí  lo mejor sería que te llevará hacía la embajada Estadounidense, o hacía algún lugar donde hayan muchos turistas Americanos, supongo que perdiste tus documentos -  solo asintió tratando de evitar el nudo doloroso en su garganta ¡Dios! ¡quiero volver a casa¡ - él, se llevó hace unas semanas a mi prima Lisa, ella era como tú, ese hombre compra jovenes rubios y....el novio de ella se la vendió, no la he vuelto a ver, según los rumores, nadie nunca sale  de allí. - desvió la mirada arrastrando con sus manos unas lágrimas de su mejillas, ellos eran como hermanos sin embargo cuando llegó al lugar solo habían manchas de sangre, el también estaba huyendo de la policía local, al casi matar al idiota que vendió a Lisa.

- Lo lamento...también te agradezco por haberme salvado...yo no sé cómo pagártelo - el castaño solo movió la cabeza negativamente.

- Debemos crear un plan para que puedas salir del país. - propuso.

- ¿Tienes algún móvil? - este saco de su bolsillo un celular con la pantalla trisada, pero parecía aún funcionar.

- No tengo para llamadas internacionales, pero pienso que si haces algún vídeo yo podría buscar alguna red wifi y enviarlo. - asintió emocionado.

- Es la mejor idea.

En aquel rincón  empezó la grabación del vídeo, trato de expresar su angustia, mencionó direcciones que Bam Bam le había dicho y el apellido del hombre que intentó secuestrarle Jeon, su desacuerdo con la injusticia cometida hacia Jimin, su miedo, el deseo de que su padre y hermano fueran a rescatarlo y en caso de no salir con vida les dijo cuánto los amaba entre lágrimas. ¡Oh Dios, mamá debe estar llorando!; ¡Lo siento mamá!.

La siguiente hora Bam Bam fue de camino hacia al pueblo cercano para enviar el video a la dirección electrónica que Leo le había entregado, mientras el asustadizo rubio se quedaba en aquella casa alejada y quizá seguro.