Mi lindo Omega

6: Un omega para Junseo

El camino a casa de Seokhwa fue menos incomodo de lo creyó, había ciertas miradas puestas en él pero estaba relajado, tenía tres Alfas protegiendolo.

-Falta poco para llegar -Anuncio Seokhwa emocionado por llegar a su casa.

Estar en compañía de los tres alfas que recién conoció no fue tan mala como imagino pero volver a casa junto a su hermano lo emocionaba bastante. Necesitaba contarle las millones de emociones que sentía cada vez que estaba junto a Donghan a su hermano, quizás el sabía la respuesta.

En un momento Seokhwa sacó su celular avisandole a Yongha lo cerca que estaban. En poco tiempo el visto fue clavado y con ello un adorable puchero en los labios del omega.

-Yongha tonto -Insulto mirando el aparato móvil.

-¿Que paso con tu hermano? -Pregunto Junseo curioso.

-Me clavó el visto! -Respondio alzando la voz- Solo tenía que poner un Okey y es suficiente, para mi lo es -Confeso en un tono tierno y meloso.

Yohan vio como su hermano mayor tragaba saliva, controlando cada parte de su cuerpo para no dejarse llevar por su instinto animal.

-¡Seokhwa!.

El rubio siendo llamado capturo la atención de todos, un chico alto vino corriendo hacia el grupo de Alfas para abrazar a Seokhwa.

Donghan no reacciono, supuso que por la voz asustada se trataba del hermano mayor que estaba ansioso por ver a su hermanito.

-Me tenías preocupado Seokhwa, pensé que algo te habia pasado.

-Hyung, estoy bien, sigo entero y sin marca.

-Ay Seokhwa.

En el momento que los hermanos se separon, la mirada de Yongha se posó en los tres alfas pero en el instante que se mirada se cruzó con la del Alfa menor, una corriente eléctrica recorrió toda su espina dorsal, junto a un deseo inigualable de desel sexual.

-Junseo -Llamo Donghan a su hermanito viendo la mirada del omega- Ven aquí ahora.

-Hyung... Yo...

-¡Kim Junseo!.

La voz de mando que nunca uso, salió naturalmente de los labios de Kim Donghan, Junseo como cachorro regañado fue con su hermano mayor pensando en la casi tontería que haría.

Por otro lado, Donghan vio el terror en los ojos del chiquitín, avergonzado se le acerco, había asustado al chiquitín que tanto había esperado.

-Perdóname -Rogo Donghan con la cabeza agacha arrodillándose frente al omega- Prometo sólo usar esa voz cuando sea necesario, sé que tienes miedo pero podía pasar algo malo e inapropiado.

El chico de cabellos dorados estaba sorprendido por el comportamiento arrepentido del Alfa. Definitivamente puede confiar en él, ¿Qué clase de Alfa se arrodillaría frente a un omega?.

-Perdóname -Volvió a pedir Donghan.

Lo único que necesita en estos momentos con urgencia Donghan, es el perdón del omega asustado. No quiere tener una mala impresión del menor, moriría por completo con solo imaginar que el lindo omega no quisiera verlo nunca más en la vida.

-Seokhwa, e-es mejor que entremos a casa -Dijo Yongha nervioso.

-¿Por qué? ¿Qué pasa? ¿Te encuentras bien? -Preguntó preocupado Seokhwa tomando de los hombros a su hermano.

-Chiquitín -Volvió a llamar Donghan- Tú hermano y el mío -En ese momento Donghan pensaba contarle el cambió repentino de su hermano.

-Hyung, hay que hacer que entre a casa -Dijo en un tono serio Junseo.