Butterfly (DomKat) [EDITANDO]

Capítulo 62

Punto de vista, Katherine.

El sonido del despertador ahuyentó mi sueño profundo. Comencé a buscarlo con el tacto, sabiendo que mi vista fallaría a esas horas. Tomé el pequeño aparato en mis manos cuando lo encontré, y apreté el botón de "apagar". Poco después, escuché el sonido de la puerta abrirse, y el olor a café recién hecho entró por la habitación. 

- Pensé que no lo escucharías. - Escuché su tono alegre mientras entraba y se sentaba a la orilla de la cama. 

- Aún no quiero salir. - Me quejé mientras me dejaba caer de nuevo, tapándome con la sábana hasta el rostro. 

Ella comenzó a reír.

- Es tu culpa. - Acusé, sabiendo que se defendería al momento. 

- ¿Perdón? - Su tono indignado me causó gracia. - Katherine, fuiste tú la que no quería dejarnos dormir. - Sentí un golpecito de su parte en mi hombro. 

- Auch. - Me quejé de nuevo. - Bueno, pero tú accediste, y eso te hace culpable también. - Seguí retándola. Ella bufó.

- Como si no hubieses querido que "accediera". - Resaltó la última palabra que dijo y yo comencé a reír, jurando que en esos momentos ponía los ojos en blanco. Me acomodé mejor volteando hasta quedar de espaldas en la cama, y la vi; estaba totalmente arreglada, su cabello colgaba en hondas casi hasta mi rostro, gracias a que ella se inclinó más a mí mientras yo aún seguía acostada. Podía ver su mirada amenazante en mí, y sus labios queriendo evitar sonreír. Era normal que Dominique fuese más puntual que yo, pero esta vez yo tenía cierta razón; la noche anterior nos ocupamos mucho, y no necesariamente en dormir. 

Ella se acercó y besó tiernamente mis labios.

- Te preparé algo para comer. - Me dio un último beso antes de separarse y levantarse de la cama. Yo me quejé, pero esta vez inaudible para ella. Tenía que apresurarme, y aunque mi único deseo en ese momento fuese quedarme con ella en la cama todo el día, el trabajo nos esperaba. 

Este, era el penúltimo capítulo de la serie; unos días más, y comenzábamos a filmar el último y a prepararnos para las convenciones y la promoción y Lo único que quería era que todo saliera bien. 

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- No puedo creer que estemos casi al final de la segunda temporada. ¡Todo pasó demasiado rápido! - Comentó un poco sorprendida, mientras jugueteaba con los dedos sobre su regazo. 

- Yo tampoco puedo creerlo. - Coincidí mientras veía la carretera. - Pero es gratificante ver como han aceptado todo esto. Ellos son fantásticos, Domie. Creo que nunca sentí un impacto tan positivo antes, de esta forma. - Hablé sinceramente, refiriéndome a los fanáticos de la serie. 

- Lo sé, son tan maravillosos, y es increíble.  - Habló con profundidad en su tono, como si no lo pudiese creer. Su vista se mantenía fija en el cielo, observando los colores que nacían de él. No dejé mi sonrisa al verla, ella siempre hacía eso, nunca se perdía algún espectáculo que el cielo podía darle. Era una amante nata de todo lo naturalmente hermoso en el mundo. Era esencia pura de sencillez, era hermosa, y yo, era tan afortunada de tenerla. 

Me detuve en un semáforo rojo, mientras ella seguía observando. Me hizo gracia que incluso, ni siquiera notase que el auto había parado. 

- ¿Qué? - Preguntó cuando al fin se dio cuenta. 

- Nada. - Negué levemente. 

- ¿Te gusto? - Preguntó en un tono divertido, levantando las cejas.

- Pf, quisieras. - Respondí, siguiendo el juego. 

- ¡Pf! Tú quisieras que yo quisiera. - Contraatacó. ¿Piensa que puede dominarme?