Chapter 50: Fights

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Muerdo mi labio con rudeza, ya han pasado cinco días desde que esto en éste hospital. Cinco días exactos, y hoy, puedo por fin ver a Harry.

Louis hace como veinte minutos que me ha enviado un mensaje diciendo que vendría también, pero aun no ha venido. Me dijo que lo esperara, y así lo hice. No tenía razones para esperarlo, pero yo simplemente quería que ambos pudiéramos ver a Harry a la vez. Nos lo merecíamos y lo necesitábamos.

Finalmente siento una mano en mi hombro, y al girarme veo a Louis. Le sonrió ampliamente.

-       Hace mucho que no te veía sonreír de ésta manera- me dice.

-       Uhm, ah, bueno, ya me ves- digo nerviosa, colocando un mechón de cabello detrás de mi oreja. Louis no se ve tan contento como yo.

-       Grace, ¿crees que estarás preparada para verle?- ambos empezamos a caminar hacia el ascensor, y yo le doy al botón para que éste venga del piso en el que esté.  

-       ¿A qué te refieres?- pregunto, mientras entramos dentro del ascensor, y yo le doy al número cuatro, para ir a la cuarta planta.

-       Digo… él está muy mal, probablemente lleno de cables y aparatos electrónicos, y con un aspecto brutal. Te sentirás mal contigo misma si lo ves así, te echarás la culpa de todo- contestó él, mientras sentíamos que el ascensor se movía.

-       Yo no voy a echarme la culpa. ¡Yo no me echo la culpa!- Louis me mira levantando las cejas.

-       ¿Ah no?

-       No.

-       Seguro, Grace, seguro- contesta con ironía.

-       Louis tampoco estoy haciéndolo siempre.

-       Lo haces siempre, Grace. Crees que tú eres el problema en todo lo malo que pasa a tú alrededor, pero no siempre lo eres, entiéndelo.

-       ¿Y a caso no puedo sentirme culpable en éste momento?

-       No. Tú no le hiciste nada a Harry. ¿No lo hiciste, verdad?

Rebusco en mi mente, mi último recuerdo con Harry, mientras las puertas del ascensor se abren al fin y salimos al pasillo.

Pero mi sonrisa se esfuma poco a poco, cuando recuerdo como peleamos cuando él me vino a buscar. Recuerdo aun su voz gritándome, y llamándome inmadura. Y recuerdo que yo me creía que yo era “su mierda”, sin saberlo realmente si lo era o no. No debí haber actuado así, tan… inmadura, como él me dijo.

Y después de eso, solo fueron miradas, y alguna sonrisa.

Pero la última vez que le vi, yo le había sonreído. Y vi como él lo hacía, disimuladamente. Pero eso no significaba que estuviéramos en paz, o reconciliados. Solo necesitábamos un poco de tiempo.

Nos acercamos más a la habitación, y tomo una respiración profunda antes de entrar junto a Louis. Ya puedo escuchar el ruido de las máquinas conectadas al cuerpo de Harry, emitiendo el latido de su corazón.

Finalmente logro ver a Harry tumbado en la cama, dormido. Se le ve tranquilo, y para nada drogado o borracho. Su piel tiene un tono algo pálido, pero no se ve tan terrible como cuando se drogaba. Está guapo, muy guapo. Bueno, es que él es guapo.

-       Espero que despierte pronto- digo en voz baja.

-       Grace, él podría estar así por meses- oigo la voz de Louis. Y aunque sé que tiene razón, decido no ponerme a llorar o gritarle que no es cierto.

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