Chapter 19: Senseless

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Harry’s P.O.V

Cuando ésta mañana vi a Grace hablando con Niall animadamente sentí mi alma caer y romperse en pedazos.  Bueno, yo nunca he tenido celos de Niall por nada. Nunca. Él tenía lo suyo y yo lo mío. Y Grace era mía. Solamente mía, ni de Niall, ni de Louis. Estoy tratando de alejar estos pensamientos posesivos de mí porque sé que no me hacen mejor persona, y porque sé que a Grace le pasa algo y si mi comportamiento no es correcto ella podría explotar, y yo también podría explotar, y entonces arrasaríamos con todo a nuestro paso como si solo importara la persona que tiene razón. Y la gran pregunta es, ¿quién tendría razón, ella o yo? No estoy preparado para responder aun. Debo esperar. Debo conocer a Grace para saberlo, pero, ¿cómo? Ella no hace más que ignorarme, y eso me está matando.

Además, ella tenía razón. ¿Cómo pude hacerle esto a Lily? Yo simplemente saqué conclusiones precipitadas y sin pensar, como que ella me engañaba. Pero no es cierto, ¿no? Yo realmente no lo sé, no debería haber pensado aquello siendo yo el que la engañó.

-       Hey- noté como Lily colocaba su mano en mi brazo, haciendo que la mirara- ¿Estás bien, Harry?

-       Ya no más- dije yo, pensando.

Lily frunció el ceño. Sentí que todo a mí alrededor se fundía y se volvía borroso. Me dolían los ojos. Quería a Grace, la quería a mi lado y no al lado de Niall.

-       ¿Harry qué te…?- no dejé acabar a Lily.

-       Ya no más contigo Lily- contesté sin pensar. Era lo que quería decir, y lo hice. Lily me soltó de golpe.

-       No te entiendo.

-       No te quiero Lily- dije sin más.

-       P-pero Harry yo…

-       No quiero seguir saliendo contigo más- volví a decir, y empecé a caminar hacia adelante, hacia Niall y Grace.

Grace me miró, y volvió a mirar a Niall. Sentía que mi garganta estaba seca, y que no podía respirar. Entonces, de golpe, y con rapidez, perdí la consciencia y el control de mi mismo.

Al abrir mis ojos tuve que volverlos a cerrar, por la cegadora luz de la habitación. Los abrí poco a poco, y observé a mí alrededor. No había nadie, estaba en la enfermería. Toqué mi cabeza, y acaricié mi cabello suspirando, recordando que después de haber cortado con Lily me había desmayado… ¿Había cortado con Lily? ¡Había cortado con Lily!

-       Oh Dios mío, ¿pero qué hice?- tapé mi cara con mis manos.

Pero yo quería dejar a Lily. Quería decírselo, pero no de aquella manera. ¿Por qué? ¿Por qué? ¿Por qué? Ella me despreciara ahora. Como Grace. Ambas lo harán.

Sentí que iba a llorar, pero no lo hice. Alguien entró en la habitación. Era Louis. Me quedé observándolo, él parecía relajado. Se cruzó de brazos, mirándome.

-       ¿Qué hiciste, Harold?-  preguntó. Parecía una pregunta retórica, y aunque no lo fuese tampoco me habría atrevido a contestar.

-       Anne te matará por lo que has hecho, lo sabes, ¿no?- bajé la mirada.

-       Y Lily también- Louis se sentó en mi cama, y lo miré.

-       ¿Cómo está Lily?

-       Destrozada. Ha sido un día duro para ella.

-       ¿Ha sido? ¿Qué hora es?

-       Llevas aquí más de cuatro horas, Harry. Las clases están a punto de acabar, iban a llevarte ahora al hospital después de enterarse de lo que tenías.

-       Oh.

-       Les dije que no te llevaran. Pero la próxima vez lo harán. Ya es la segunda vez que esto pasa, mejor ya deja esa mierda que tomas o te llevarán a un lugar peor que el instituto- Louis me miró amenazante.

Bajé la mirada, sintiéndome culpable por todo. Y lo era, sí, pero no tomaba aquello porque sí. Gemma estaba mal, muy mal, y era por mi culpa. Y con lo de Grace ya no aguanté más.

-       ¡Ya lo sé Harry, lo sé!- gritó Louis levantándose- Ya sé que Gemma está en el hospital y está muy mal, pero esa no es una escusa para drogarte.

-       No fue por Gemma.

-       ¿Entonces por qué?- preguntó Louis.

La puerta se abrió, y vi a Anne, mirándonos a Louis y a mí. Louis se marchó enfadado, sin decir nada, y arrastrando los pies. Mi madre se acercó a mí. Yo me senté en la cama, dispuesto a marcharme con ella a casa. Me quedé sentado, mirando sus ojos rojos y cristalinos. Su mirada estaba perdida en mí, como si no me mirara a mí. Pero en realidad lo hacía.

-       Pensé que te perdería- dijo ella, mirándome, con la misma expresión- Como a Gemma.

-       No has perdido a Gemma, mamá- dije intentando aguantar la mirada de mi madre, viéndola llorar. Ella sollozó y negó con la cabeza.

Me abrazó y acarició mi cabello. Mis ojos se dirigieron a la puerta, abierta. Mostrándome una Grace con la boca entre abierta, estupefacta, y confundida, mirándonos.

* * * * *

Quizás sea un capítulo un poco raro y que no se haya entendido muy bien, pero las cosas se aclararán un poco en el siguiente :) y siento que sea un capítulo un tanto corto :( 

 

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