Descubierta

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Tengo el padrino más irresponsable y responsable a la vez. Por un lado arriesgaba su propia vida por ahijado, pero por otro ¡Arriesga su vida! Caminaba ensimismada por los pasillos, acaba de salir de la biblioteca, cuando...

- ¡Canuto!

Me voltee para saber quien me estaba llamando

- ¡Oh! Hola, Harry. Hola, Ronald

Harry se acerca, sorprendido, no sé por qué

- Así te llamas - dice Harry, aun sorprendido

- Más que llamarme es un apodo, creí que lo sabían

- Y tu hermano es Lunático

- Sí, ese es su apodo - digo sin comprender a dónde iba la conversación

- ¿Y Cornamenta y Colagusano?

- ¿Qué sabes de los Merodeadores? - dije entre miedosa y asombrada

- No, nada, nada - y los dos echan a correr

Caminé unos pasos más cuando alguien más me llamó

- ¡Cassie!

- ¿Qué quieres, Blaise? - dije con cara de pocos amigos

- ¿Ya me perdonas? ¿No es suficiente castigo, el castigo en sí y los puntos menos?

- Blaise, siempre hemos hecho bromas juntos, pero esta vez te pasaste. Saboteaste el partido y, para colmo, con algo que sabes que a mi también me pudo haber afectado

- No lo pensé bien,

- ¡No, si nunca piensas!

- Sí, soy un tonto, un descerebrado y todo lo que quieras ¿Pero me puedes perdonar?

Lo pensé un rato, Blaise era muy bueno conmigo, y llevaba casi meses enojada con él. El pobre se torturaba cada día, no me parecía justo seguir torturándolo después de unas sinceras disculpas.

- ¿Y me das los cromos que me faltan para completar mi colección?- dije con una sonrisa

- Hecho - dice sonriente - Deja que te ayude con los libros

Y Blaise me acompaña a la sala común, donde Ginny me esperaba con los materiales para nuestro trabajo de Encantamientos

2) Cassiopeia Malfoy y el prisionero de AzkabanDonde viven las historias. Descúbrelo ahora