2) Cassiopeia Malfoy y el prisionero de Azkaban

Disculpas

POV: Draco

Como si perder la copa no fuera mucho, a medida que se aproximaba junio, los días se volvieron menos nublados y más calurosos, pero los exámenes se echaban encima y, en lugar de holgazanear, teníamos que permanecer dentro del castillo haciendo enormes esfuerzos por concentrarnos mientras por las ventanas entraban tentadoras ráfagas. 

Me consta que los gemelos Weasley habían tratado de disculparse con Cassie, quien seguía molesta porque deliberadamente le habían lanzado una bludger, cosa que ellos aceptaban, y querian remendar. 

- Si realmente fueran mis amigos no les importaría un partido. Yo estoy feliz de que Harry haya ganado, pero no por ellos. Y aun así, si le quitamos el que soy su amiga ¡Sigue siendo trampa!

Ellos pasaban más horas de las que nunca lo había visto en la biblioteca por dos motivos: el primero es que estaban a punto de obtener el TIMO, el segundo era que la pandilla también pasaba mucho tiempo en la biblioteca, aunque Cassie les prestaba tanta atención como a un fantasma. No voy a negar que la pandilla era de gran ayuda con los miles de temas que tenía que estudiar, y las millones de clases. Aunque a veces me daba ganas de maldecir a Blaise ¡Es que se la pasaba mirando a Cassie!

Ni bien recibí mi horario de exámenes, me dió un dolor de cabeza. Entonces se oyó un leve roce en la ventana. Mystery entró aleteando, con un sobre fuertemente atenazado en el pico.

- Es de Hagrid - dijo Cassie, abriendo el sobre - La apelación de Buckbeak se ha fijado para el día 6.

- Es el día que terminamos los exámenes - observé, mientras agarraba el libro de runas que me daba Greg

- Tendrá lugar aquí. Vendrá alguien del Ministerio de Magia y un verdugo.

- Es como si ya estuviera decidido. - dice Vin, terminando su pergamino de los fantasmas

- Eso parece - dijo Greg

- Dudo que le pase algo realmente - dije, aunque tenía una pluma en la boca y no se me entendía bien, así que me la saqué y levanté la vista - Papá dijo que aún podíamos hacer algo

- ¡Ah, bueno! - dice Cassie, relajándose - Si papi lo dice...

Y lo peor de todo era que no tenían tiempo ni ocasión de visitar al profesor Hagrid, porque las nuevas y estrictas medidas de seguridad no se habían levantado, quizá con el mapa podremos ir, pero no había tiempo. Comenzó la semana de exámenes y el castillo se sumió en un inusitado silencio.

Una tarde, el ultimo día de exámenes, nos reunimos toda la pandilla en frente al lago negro.

- Otro año más de notas perfectas - dijo Ginny con toda calma

- Habla por ti - dice Vin, molesto

- Tortugas de Cumberland no era el ejercicio - dijo Greg, en las mismas

- No había ninguna raza especificada - dice Blaise

Cassie, como siempre, jugaba con su snitch, mientras desordenaba su cabello. Blaise fingía leer un libro de Vin y Greg, pero yo bien sabía que miraba de reojo a Cassie con sus piruetas y saltos. No entiendo por qué Blaise salía con tantas chicas para solo mirar a Cass. Había prometido que no me metería con Blaise a menos que fuera totalmente necesario. Claro, que todos insistían en que estaba paranoico y que ni Blaise ni Cassie sentían algo por el otro, y quizá tengan razón, pero es mi hermanita y siempre la voy a proteger. 

Ginny leí su revista de "Corazón de bruja", mientras yo me limitaba a disfrutar del sol en mi rostro, recostado en la hierba. Aún me quedaba Estudios Muggles y no era ninguna materia fácil, de hecho, mis notas perfectas peligraban por esa materia, pero creo poder con ello.

- Hola, Cassie - la voz de los gemelos Weasley hace que Blaise frunza el ceño y finja con mayor empeño estar leyendo

- ¿Qué quieren?

- Cassie...

- ¡Me tiraron una bludger!

- Fue él - dijo uno, señalando al otro. 

Se enojaron entre ellos, lo que era bastante raro, porque parecían un espejo

- George...

- Sí, bueno, lo siento. Lo lamento mucho, apunté mal

- Bueno, supongo que los puedo perdonar

- ¡¿Qué?! - dijo Blaise, ya dejando de fingir que estaba leyendo 

¡JA! Lo sabia, no estaba leyendo 

- A mi me costó casi dos meses que perdonas por la pequeña bromita en el partido de gryffindor ¿Y con ellos, que te atacaron deliberadamente, no te enojas ni dos semanas?

- Blaise, te perdoné ¿No? - dice guardando su snitch en el bolsillo y sentándose a su lado

Recostando su cabeza en su hombro, cosa que mejoró el ánimo de Blaise, y empeoró el mío. Los gemelos se quedaron a jugar cartas con nosotros un rato. 

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NOTA DE AUTOR: ¡Momento de auto-publicidad! Anden a checar mis demás historias, hace poquito publiqué una nueva, anden a darle amor y comentarios a las historias para saber que les gusta lo que escribo.