34.

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***
Ya estaban en la iglesia, los invitados ocupaban ya varios bancos y ahora los dos novios buscaban un sitio en el que sentarse para aguardar el inicio de la boda.

—Cuánta gente...Tu amiga sí que conoce gente, ha de ser muy sociable.

—Lo es, de todos modos, toda esta gente no son amigos suyos. Los hay que son familiares de ella y de su novio.

—Lo sé, pero aun así es bastante gente. ¿Cuántos invitados son?

—Mmm... Creo que unos doscientos.

—¡¿Qué?!

Izuku gritó tan alto que los allí presentes se le quedaron mirando, su novio le dio un golpe en la cabeza a modo de regañó por ello.

—Idiota, no grites. Estás dando el espectáculo.

—Pe-perdón, es que nunca había estado en una celebración con tanta gente.

—Lo entiendo pero tampoco sobrerreacciones de esa forma, que pareces tonto.

—Lo siento, no lo volveré a hacer.—Se disculpó de nuevo.

—Más te vale.

Tras aquel vergonzoso momento, la calma volvió al ambiente y los amigos de Katsuki se acercaron a ellos. Bakugou presentó a Izuku como su novio y éstos se sorprendieron tanto que no pararon de hacerle preguntas al de cabello verde hasta que la novia hizo acto de presencia agarrada del brazo de su padre.

Los invitados no podían evitar admirar a la deslumbrante novia, la cual irradiaba felicidad.

Cuando llegó al altar y se ubicó al lado de su futuro esposo, dio inicio la ceremonia.

—Estamos aquí reunidos para reunir a esta joven pareja en matrimonio pero antes leeré algunos pasajes de la biblia.—Dijo el cura.

En ese momento, algunos hicieron una mueca de fastidio pues no deseaban escuchar sermones.

"Menudo coñazo."—Pensó Bakugou.

La ceremonia siguió su curso y entonces llegó el famoso momento.

—Si alguien está contra esta unión que hable ahora o calle para siempre.

Los novios se giraron para comprobar que nadie se opusiera y tan sólo recibieron un sepulcral silencio.

—Bien, si nadie se...

En ese instante, alguien que no estaba invitado a la boda, entró.

—Yo tengo algo que decir y es: ¿Por qué no he sido invitado a esta boda, Camie? ¡Se supone que somos amigos!

—Éramos hasta que me enteré de que le fuiste infiel a Bakugou, él me lo contó todo y es evidente que me iba a poner de su lado.

—Sí, sí, sólo eres una falsa más.—Kaminari dejó de mirar a la novia para dirigir su mirada a Bakugou.—Tú, ven conmigo ahora mismo. Tenemos mucho de lo que hablar.

—¡Yo no tengo nada de qué hablar contigo, sólo desaparece y no molestes más!

—¡Me niego, vamos a hablar!

Denki se aproximó a ellos e iniciaron una pelea en la que Midoriya también se involucró, el cura no se lo creía.

—No puede ser...¡No permitiré esto en la casa del Señor! ¡Fuera de aquí!—Gritó el religioso señalando a los causantes de aquel alboroto.

Los tres accedieron a salirse de la iglesia y ahí continuaron su pelea.

—¡¿A qué has venido, maldito pikachu?!

¿Hay esperanza? [Dekukatsu]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora