Capítulo 18 I love Rock and Roll

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Heyy,

aquí me tienen de nuevo.

Me costó escribir el capítulo pero aquí lo tienen.

Espero que les guste.

Quiero que sepan que escribir esta novela y leer sus comentarios es lo que me anima día a día y estar contenta y feliz conmigo misma, al ver que hay algo que me gusta se me da un poquito bien.

GRACIAS POR LEER.

BESITOSSSSSSSSSSSSSSSSSSSS

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(Frank)

Abrí los ojos lentamente, aún medio dormido.

Un rayo de luz se colaba por la persiana e iluminaba la pequeña habitación.

Cuando tuve los ojos completamente abiertos observé el rostro de Gerard, a escasos centímetros del mío y sonreí.

Sus ojos estaban cerrados, sus brazos me rodeaban, y sus labios esbozaban una hermosa sonrisa.

Le aparté el cabello de los ojos y me dediqué a observarlo mientras dormía.

¿Cómo podía decir el médico que semejante ángel era peligroso?

-Va a venirse conmigo en cuanto despierte.-le dije, totalmente convencido al doctor.-Si él está de acuerdo, se viene conmigo.

-Es peligroso. Podría matarte en un ataque.

-No me importa.                              

-No puedo dejar que te lo lleves, Frank.-dijo el hombre, cabreado.-Debe irse con sus padres.

-¿Para qué? ¿Para qué lo metan en un manicomio? Prefiero morir y tenerlo conmigo a que él sufra.

-Estás loco.

-Sí, lo sé. Y estoy enamorado.

Sus pestañas se agitaron y su naricita se arrugó.

Bostezó en silencio y sus ojos se abrieron y se toparon con los míos.

Sus grandes ojos verdes me miraron, primero confundido, luego aliviado y a continuación tiernamente.

-Frank...-su voz sonó ronca en la mañana y no pude resistir la tentación de juntar nuestros labios en un beso de buenos días.

Él correspondió a mi beso, aún cansado por recién levantarse y se separó de mí, con las mejillas sonrojadas y murmuró un "buenos días".

-Buenos días.-respondí y lo besé brevemente y acaricié su brazo, su piel tapada por las vendas blancas.

Mil preguntas volvieron a mi mente: ¿de dónde era? ¿por qué estaba solo? ¿por qué tenía aquellos cortes? ¿por qué decían que estaba enfermo?

-Intenté suicidarme cuando mis padres me echaron de casa.-dije y él me observó pensativo. Nos quedamos en silencio unos segundos y al cabo de estos, volvió a juntar nuestros labios.

Se separó solo unos milímetros de mí, sus labios aún rozando los míos, y yo sintiendo su aliento en mi boca.

-He intentado suicidarme cinco veces, siempre en invierno y siempre el mismo día.-dijo y antes de que añadiera algo más, yo le besaba de nuevo con pasión y le abrazaba con fuerza.

Fallen angelsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora