La aventura de la joven Tn no ha terminado.
Al llegar al cielo, vive en un mundo de mentiras por parte de Dios, sobre de donde viene realmente, y su memoria fue borrada, para así que ella no tener ningún contacto con el infierno. De no ser por Yekun...
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Tn P.O.V:
El día había trascurrido muy normal, los demonios haciendo sus trabajos, Niffty barriendo las habitaciones, Husk en su bar, bebiendo, es no único que hace en el día, todo el tiempo, Charlie había entregado unos papeles a Yekun, no tengo nada más que hacer así que me acerque al demonio gato.
Husk: ¿Qué quieres Angelito?
Tn: no tendrás un jugo.
Husk: niña, aquí solo usamos el alcohol.
Mis mejillas ardieron un poco, "No podrías ser más tonta".
Husk: ¿O quieres tomar algo fuerte?
Tn: ehmm, está bien - el tipo sonríe malicioso, con su cola saca un vaso, dejándolo en la mesa, saca una botella y, la destapa y sirve de está.
Husk: disfruta - tome la bebida - será mejor que lo bebas de un solo, sabrá mejor.
No sé pero algo me dice que no lo hiciera, pero no pasará nada, ¿O si?
Bebí de un solo, el ardor en mi garganta se hizo presente, hice una mueca el cual le pareció gracioso al felino.
Husk: debiste de ver tú cara - ríe.
Tn: ¿Qué carajos es eso? - mi garganta la sentía caliente.
Husk: es Whisky, tú favorito.
Tn: nunca he bebido algo así. Es asqueroso.
Husk: ya veremos más adelante.
Angel: hey, ¿Qué tal?
Husk: cariño, debiste a ver visto la cara de esta mocosa - vuelve a reír.
Angel: no te rías cariño - toma asiento - oh vaya, el día está pasando rápido, solo hay que esperar al venado, o como lo prefieres llamar, Bambie - me golpea levemente con su codo.
Tn: no sé quien es... O no sé.
Angel y Husk me miraron confundidos.
Tn: ¿Qué?
Husk: olvídalo niña.
Tn: no lo entien...
"Buenas tardes" una voz se escucha desde la otra sala, su voz parecía como la de un locutor, podría escuchar como una clase de estática de radio.
Husk: oh mierda, llego el puto venado, por Lucifer que ni se acerque.
Las pisadas de ese demonio se alejan, Husk suspira aliviado.
Alastor P.O.V:
Había terminado de hacer unas compras, al entrar al hotel pude sentir una punzada en mi pecho, sentía la presencia de dos personajes más, no cualquier demonio, y una de ellos, era especial, decidí a ignorar y a saludar en voz alta, entre a la cocina y deje las compras en la mesa que se encontraba ahí, hoy prepararé una Jambalaya, es el pan de cada día, pero hay que admitir que ellos no se quejan de lo mismo todos los días. Empecé a cortar las salchicas, sentí un aroma muy conocido, era extraño. Negué con mi cabeza, quizás me esta haciendo una mala jugada y seguí en lo mío.
