CUATRO

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— ¡El último limpia la sala por una semana! — gritó Jisung antes de lanzarse a la piscina.

Todos los demás le siguieron el acto entre risas y quejas, demostrando sus diversos estilos de clavados. Por casi unos segundos de diferencia, Felix había quedado último, los demás chicos empezaron a molestarle diciendo que tirarían más basuras en la sala y derramarían jugos en la alfombra para que limpie con ganas, obvio todo era en forma de juego, pero Felix parecía estar tardando en entenderlo, porque su cara de espanto hizo que Changbin — quien estaba junto a sus propios amigos sentados en las sillas de tomar sol — se levantara levemente a fijarse si el menor se encontraba bien.

Su exagerada risa lo hizo calmarse.

Hyunjin miró a través de sus lentes de sol el cuerpo de sus sumisos, y sí, SUMISOS.  Incluso teniendo la advertencia de Chan de no acercarse de nuevo a Jeongin si iba a seguir cogiéndose a Seungmin, no dejó de hacerlo — era suyo y pues, las necesidades no las iba a soportar solo porque sí —, además de que hace unos días atrás había vuelto a tener un pequeño — pero satisfactorio — encuentro con el más menor de los sumisos. Si tuviera que mencionar el por qué tenía relaciones con los dos menores, era simple, Seungmin era muy bueno en el sexo y siempre lograba sacar la peor versión de Hyunjin mientras mantenían la intimidad. Sin embargo, el cuerpo de Jeongin era una tentación mayor, sus gemidos, su rostro inocente cuando lo tomaba de la cintura y le hacía de todo era excitante, además de que sus torpes intentos de ser sexy lo calentaban más, ambos lo eran buenos según él, no podía simplemente elegir a uno.

— ¿Y qué hay con tu padre Minho? ¿Ya se enteró lo de Jisung? — preguntó Seo volviéndose a recostar.

— Sí, hace como dos días de que se enteró — comentó riendo — lo hubieran escuchado cuando me llamó para gritarme, dijo que iba a cortarme las tarjetas y toda esa mierda.

— Vaya ¿Y podrás vivir sin las propinas de tus papis? — bromeó Hyunjin.

— Claro que puedo, ¿y sabes qué más puedo hacer? Pararme y ahorcarte con esta toalla — Hyunjin dejó de reírse y se giró a ver a esa linda palmera que estaba a su izquierda, ay pero que bonita planta.

— ¡Minho hyung! — el mencionado dejó de amenazar con la mirada al rubio de cabello largo para mirar ahora a su pareja — ¿no quieres venir?

— No, aún no — le respondió — diviértete.

Han asintió y siguió correteando en el agua para tratar de ahogar a Seungmin junto a los demás. El castaño sonrió al verlo jugar tan alegre, Jisung ya llevaba saliendo — no realmente — con él hace ya más de 3 semanas y las cosas estaban yendo demasiado bien, se entendían demasiado, además de que les gustaban pasar tiempo al lado del otro, el sexo, los mimos, la actuación falsa de ser su novio ¡todo! Todo estaba bien con Han Jisung.

— ¿También vas a hacer el Changbin challenge? — su amigo de cabello rubio y cuerpo demasiado trabajado le interrogó, ya le parecía raro que Chan estuviese tan callado — ¿le vas enserio con Jisung?

— No lo creo — contestó — jamás seré como Changbin que le pidió a su sumiso que sea su novio solo porque le soporta sus idioteces.

— Cállate o te parto la cara — amenazó levantándose de su asiento mientras se quitaba el polo, caminando lejos de sus amigos luego de lanzar al suelo la prenda.

— Ya lo hiciste enojar, bien hecho, hacer enojar al que compra las cervezas — comentó aún sin verle a la cara, Hyunjin sabía que el castaño podría golpearlo o algo — Haz algo Minho.

— Ya sé, ya voy — se levantó igualmente que su amigo, arrojando su polo negro al suelo para luego meterse al agua con los demás.

Ya con casi todos dentro de la piscina, Chan terminó por rendirse y decidió irse con ellos también, además que el sol ya estaba insoportable y su piel se estaba quemando de estar ahí echado. En cambio, el otro rubio no tenía planes de meterse al agua aún, no después de haber visto el cuerpo de Seungmin mojado y poniendo una sonrisa coqueta hacia donde se encontraba. 

SÍ  O  NO  | HYUNINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora