𝗛𝗔𝗥𝗗 ♡ 𝗠𝗶𝗻𝘀𝘂𝗻𝗴

24

Han Jisung.

Decir que estoy feliz es poco.
A pasado un mes y medio y permitanme decir que a sido la mejor temporada de mi vida, Minho y yo pasamos casi todo el día juntos, tenemos como una conección magnética que nos mantiene unidos, no sé muy bien como describirlo, sólo se que es lo mejor.

Ahora estamos en su departamento ¿por qué? Pues en unos días tengo un examen y digamos que el me dijo que podría ayudarme, estudiamos, por supuesto, cuarenta y cinco minutos pero lo hicimos, ahora estamos viendo películas, el me dijo que le pidió unas a Changbin y pues, todas son de terror.

Ah Changbin, no sabes cuantas ganas de matarte tengo.

Estamos sentados en su sofa, el en la esquina y yo a su lado, tengo mi cabeza en su hombro y el me abraza. Es tan lindo.

Sobresalto en mi sitio al ver un ¿monstruo? ¿fantasma?. En fin. Minho suelta una risita burlándose de mi y le dedico una mirada asesina.

Entonces mi mente se hace una pregunta que lleva rondando en mi cabeza las últimas semanas.

Minho y yo

¿Que somos?

O sea, pasamos tiempo juntos, nos besamos, sentimos lo mismo el uno por el otro, pero aún así no somos algo definido.

Lo miro, su rostro esta con el ceño levemente fruncido, inconscientemente, concentrado en la película, es tan perfecto a mi punto de vista, aún sigue pareciéndome irreal que le gusto, cada vez que lo recuerdo es como que “¡¡WOW, ESO NO ME LO ESPERABA!!”

—Minho. —lo llamo en un susurro y el me mira a los ojos.

Me encantan sus ojos, podría mirarlos horas y horas como si de una obra de arte se tratase.

—Dime. me sonríe y empieza a acariciarme el cabello.

Este es el momento en el que no estoy seguro si hacer la pregunta, quizas salga corriendo o me ignore.
Sacando esas ideas de mi cabeza me siento correctamente en el sofá y el imita mi acción.

—Tu y yo —levanto mi mirada para cruzarla con la suya. —¿Que somos?

Se queda callado unos largos y agonizantes segundos, esto no me gusta.
Lo veo sonreir y comienza a hablar.

—¿Que somos?  —dudó al hablar. —¿Que seremos? Estoy dispuesdo a ser lo que tu quieras, lo que me pidas, ¿Quieres que seamos novios? Lo seremos. ¿Quieres que volvamos a ser amigos? Lo seremos. ¿Quieres que seamos amigos con derechos? Lo seremos. Lo que tu quieras, cualquier cosa. ¿Que quieres que seamos?

—Todo. —digo en un susurro, y es que si hablo, mi vos saldrá entrecortada, malditos nervios.

Me dedica otra sonrisa.
—Entonces ¿Quieres ser mi novio? O ¿Mi todo?

¿Y? ¿Que se supone que responda?
Un 'si' sonaría un poco seco, un 'por supuesto que si' sonaría demasiado desesperado –cosa que estoy, pero no lo admitiré– No respondí, en cambio me lancé arriba de el y lo besé.

Ahora si se siente bien, ya lo puedo besar sin miedo a que me rechace o que se sienta tímido.
Puso su mano en mi mejilla y la fue corriendo hasta la parte de atrás de mi cuello para acercarme más a el, puse mi mano en uno de sus hombros.
Sentí como mordía mi labio inferior, me separé y le di un golpecito en el pecho.
—Oye~ —me quejé con un puchero. —Eres malo, —me crucé de brazos. —un novio muy malo.

—Soy un novio malo. —afirmó. —pero aún así me quieres mucho.

Lo miré sonrojado y le di un beso rápido en su mejilla.
Volvimos a ver la película, ahora estabamos acostados, de una manera un poco extraña en el sofá, el estaba acostado de lado con un brazo puesto en el pasamanos apoyando su cabeza y yo estaba en lo que quedaba de sofá con mi cabeza en su pecho. ¡¡TAN BELLOS!!