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Han Jisung.

Ya habían pasado dos semanas desde el primer ensayo y luego de eso hemos vuelto a practicar unas cinco o seis veces.

Lo tenemos todo preparado para mañana y esperamos que a todos les guste.

Aunque todavía nadie sabe la canción que bailará Minho, según el le da vergüenza mostrárnosla, venga ya, se la va a enseñar a toda la escuela y no a nosotros.

Bueno, ya mañana nos enteraremos que es lo que va a hacer.

Me acosté en mi cama dispuesto a dormirme pero el movil comenzó a sonar.

¿Si? —conteste sin ver quien era.

Hola Jisung. —dijo emocionado.

—¿Chan?

El mismo. —escuché como soltaba una pequeña risita.

Respire hondo para no gritarle unas cuantas cosas.

—¿Que necesitas?

-Pues... Ya sabes, mañana tengo planeado pedirle a Heejin que sea mi novia pero me da verguenza. —escuché como suspiraba.

—No te preocupes hyung, se ve que gusta de ti, al igual que tu de ella, si no se lo dices se cansará y pasara pagina, asi que escuchame bien, si no se lo preguntas mañana...te cortare lo-

Ok, entendi...¿Y tu? ¿No tienes ningun regalo para nadie o un amor secreto por allí?

No. —conteste disfrazando mi nerviosismo con seriedad.

Si claro, suerte y nos vemos mañana, a por cierto, no te podré ir a buscar mañana para ir a la escuela.

—No pasa nada, ve y recoge a tu chica.

—¿Como sab-

No lo dejé terminar ya que colgue la llamada, este Chan se pone muy intenso abeces.

(...)

—Nos vemos en la tarde. -dije saliendo de mi casa.

Caminéhasta montarme en el auto color negro, el cuál nunca uso. Me senté en la parte de atras y salude al chofer de mis padres.

—Buenos días Jae. —le dije sonriente.

—Buenos días señor Han.

—Ya le dije que no me diga “Señor Han” solamente digame Han o Jisung, como guste. —explique con una sonrisa.

—Esta bien señ- Jisung. —comenzó a conducir.

(...)

—Gracias por traerme, hasta pronto Señor Jae.

Me despedí de el y fui hacia mi salón, al entrar vi que no había nadie asi que me senté en mi sitio y comencé a escuchar la canción que cantaría, no es que no me la sepa, es solo que la quiero tener todo el tiempo en la cabaza para no cometer ningun error. En fin, cosas mias.

Tras perder la cuenta de las veces que escuché la misma canción una y otra vez me decidí por quitarme los audifonos ya que faltan cinco minutos para que comiencen las clases.

Hoy por ser catorce de febrero -y ademas viernes- daremos tres clases para luego ir al pequeño teatro de nuestra institución y realizar la actividad, y ya después no más escuela hasta el lunes.

Uno a uno iban entrando mis compañeros y cada uno se sentaba en su puesto, yo por suerte me siento solo.

—Good morning students. —dijo el profesor entrando y colocando sus cosas sobre la mesa.

𝗛𝗔𝗥𝗗 ♡ 𝗠𝗶𝗻𝘀𝘂𝗻𝗴 Donde viven las historias. Descúbrelo ahora