48. ¿Está es tú forma de seducirme?

1.2K 54 34
                                    

Matthew

No disimulo mi molestia cuando observó al inútil del exnovio de mi hermana, no se ni a que va trayendole serenata a altas horas de la noche. Jane frunce las cejas furiosa yendose al baño de inmediato y ruedo los ojos volviendo a mi teléfono. Pasan unos minutos y ella vuelve con una tina de agua que de seguro esta tan helada como el hielo.

—¿Es enserio? —le preguntó burlón.

Jane hace una mueca sarcastica.

—¿Tú qué crees?

—Vas a lavar la basura.

Me encojo de hombros asintiendo y viendo como abre la puerta riendo. Asomó mi cabeza a la ventana escuchando la voz odiosa de su ex, que ni siquiera recuerdo su nombre. Él sonríe cuando la ve, pero palidece y deja de cantar al instante. Jane lanza el balde de agua directo al castaño y lo empalpa en segundos.

—¿Qué demonios, Jane?

Sonrió satisfecho, el chico esta echo una bola de temblores y mi hermana tiene la cara llena de burla.

—¡Eso es lo que te mereces, gillipollas! Ahora largate que ni para cantar sirves.

Aplaudo y río abiertamente llamando la atención de los vecinos que no dejan de reirse. El castaño esta tan avergonzado que termina largandose de una buena vez.

—Y pensar que antes decías que era tu principe azul y esas mierdas.

Me burló de ella que esta cerrando la puerta con fuerza y mirandome divertida.

—Pues estaba ciega, que te puedo decir.

Asiento convencido de que es cierto. Bostezo con frustración y me despido de ella.

—Tu novio espanto mis sueños, me debes esta.

Jane rueda los ojos palmeando mi espalda cuando desaparece en el pasillo. Hago lo mismo volviendo a la cama, estoy tan cansado que no me da para burlarme. Duermo muy a gusto hasta las dos de la tarde, la verdad es que estoy disfrutando el último día de vacaciones. Los meses se pasaron volando y mañana comienza la tortura del último año. Buscar universidades ya es un problema, porque no se a cual quiero ir, pero al menos se que tengo varias opciones por ahora.

Hoy habrá una fiesta como lo hay todos los malditos años y a mi hermana se le metió la idea de querer ir conmigo. ¡Solo quería dormir todo el día!

—Termina de comer y quita esa cara de culo.

—Como diga, su alteza —le hago una reverencia burlona.

—¡Deja de ser así que no te voy a aguantar!

Ruedo los ojos hastiado.

—Entonces mejor largate y déjame tranquilo.

Jane golpea la mesa de vidrio molesta.

—¡Ahh! Bien, me ire con mi cuñada a ponernos bellas y quiero encontrarte a las siete vestido —me advierte.

Le sonrió cuando escucho con quien se verá.

—Dile que el negro es su color...

Mi hermana suelta un suspiro abriendo la puerta.

—Como digas, hermanito. Negro, no lo olvidaré.

Y por fin se va. Termino de comer y me voy a mi recámara a envolverme con las sabanas de nuevo.

—Siri —llamó al parlante. —Pon la quinta tenporada de "Lucifer"

Me hace caso y sonrió apretando mi almohada para ver al diablo en acción. A las seis ya estoy listo para bañarme y cambiarme. Me ajusto la correa del pantalón negro y me abrochó la camisa blanca. Suelto un suspiro frustrado cuando oigo la puerta abrirse. Jane entra con un vestido celeste puesto y con el cabello rubio totalmente lacio. No puedo negar que se ve bonita, ya que es justamente mi hermana de la que hablamos.

Tu Eres MíaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora