Décimo séptimo capítulo

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Alondra esperaba en la sala de espera junto con los niños, observaba como algunos doctores y enfermeras entraban y salían de la habitación dónde habían metido a su amiga, estaba muy preocupada.

He: ¿mi mamá se va a morir? (Preguntó sollozando).

Al: no, cariño, claro que no, no se preocupen, Refugio estará bien.

En la sala de operaciones.

Enf: esta en estado, doctor, debemos tener cuidado con el bebé al examinarla (avisó).

Doc: ¿viste su ficha médica?, ¿sabes de cuánto está?.

Enf: tiene apenas unas semanas de embarazo, ¿por qué lo pregunta?.

Doc: por que sospecho que este desmayo repentino que ha tenido podría ser por una enfermedad crónica en la zona frontal del cerebro, esto a priori no afectaría al feto pero estoy casi seguro de que si tuviera al bebé moriría en el parto...aún estamos a tiempo para provocarle un aborto.

Enf: doctor, no podemos hacer eso sin el consentimiento de la paciente, debemos esperar a que reaccione para poder preguntarle y que tome la decisión que crea correspondiente.

Doc: eso es lo que vamos a hacer, jamás se me ocurriría tomar una decisión de ese tipo, es inmoral, esperaremos a que vuelva en si para explicarle como esta la situación. Sal y habla con sus familiares para tranquilizarlos.

Enf: si, doctor, con permiso (salió dejándole con el resto de su equipo).

En la sala de espera...

Al: deja de llorar, Héctor, se que estás asustado pero estás asustando también a Ángelito.

Enf: Familiares de Refugio Chavero (preguntó, de inmediato Alondra se acercó a ella) ¿es usted?.

Al: si, ¿como está mi amiga?, ¿se pondrá bien?.

Enf: Ahora mismo sigue sin despertar pero estamos convencidos que lo hará en las próximas horas. Mire, sabemos que la señora está embarazada y nos gustaría, si es posible que el padre del bebé que espera estuviera aquí.

Al: ¿es necesario?...

Enf: si, mucho. cuándo la señora chavero despierte vamos a hablar sobre el embarazo y eso implica también que el padre de la criatura esté presente, ambos deben tomar una decisión importante, aunque más que él, ella. Pero sería bueno que estuviera aquí.

Al:...bueno, si es así, yo le llamaré para avisarle.

****

Ri: ¿y que esperabas?, ¿que volviera contigo como si nada después de haberla tratado como una vil ingrata interesa?, obvio que no, Atilio, nunca has sabido tratar a las personas, ni siquiera a la que amas (indignado).

At: entiéndeme, Ricardo, ¿como reaccionarías tú si un familiar de la mujer que amas te la relatara de una manera tan...terrible?. Por un momento pensé que Refugio podría estar conmigo solo por algún interés económico.

Ri: ¿y para qué iba a estar contigo por dinero?, por favor, tu mismo me contaste que rechazó tu oferte de ayudarla con su negocio, si fuera una interesada ella misma te hubiera pedido el dinero sin esperar a que tú se lo ofrecieras y mucho menos lo hubiera rechazado después.

¿Qué es el amor?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora