Mis One-shots de Mystic Messenger

After ending Ray

—No llores.

—Lo siento, lo siento mucho, no pude salvarlo.

—No te preocupes, has hecho lo que has podido. Esto no es el final, puedes intentarlo de nuevo, estás a tiempo.

—Pero es la segunda vez que acabo con ese final horrible. Creía que lo estaba haciendo bien y ahora ya no sé cómo hacerlo.

—No es tu culpa, sino la de ellos. Esta vez lo han puesto difícil porque es el final.

—¿Por qué? ¿No nos han hecho ya sufrir demasiado? Yo... llevo 8 días seguidos... no creo que pueda soportarlo mucho más. 

—Lo harás, porque en el fondo sabes que no quieres rendirte.

—Es cierto, quiero salvar a tu hermano. Pero no quiero volver a verte sufrir, a ti y Saeran, al resto de la RFA. Si doy al reset volverás a pasar por lo mismo otra vez y  no puedo prometerte que esta vez consiga salvarlo.

—Lo lograrás. A la tercera va la vencida, ¿no? Yo confío en ti.

—No deberías tener tanta confianza en mí.

—Pues la tengo, ya me has demostrado antes de lo que eres capaz. Así que ahora deja de llorar y céntrate en tu misión. Ten fe en ti, todos creemos en ti. He encontrado algo en internet que puede ayudarte, pero no se lo digas a los jefes, ¿de acuerdo? Bien, buena suerte en nuestro último viaje.

Bajé la vista de nuevo al móvil. Ahora que las lágrimas se habían secado al fin podía ver la pantalla de inicio del juego. Puse mi teléfono frente al despertador para iluminarlo con él. Las 3:36 de la mañana. ¿Llevaba más de una hora llorando? Todavía estaba a tiempo, solo tenía que decidirme. Dejé el móvil de nuevo sobre mis piernas. Nunca había pensado que podría llegar a llorar por perder en un simple juego, pero también era cierto que era la primera vez que sacaba un mal final sin que yo lo quisiera y aquel no era agradable precisamente. 

Lo pensé unos minutos más. Era cierto que no quería rendirme, pero si lo intentaba de nuevo volvería a sufrir otros 4 días y ya era demasiado. Contemplé la pantalla, el mensaje de bienvenida de Seven era demasiado alegre para la situación. No. No podía dejarlo así. Tenía que intentarlo al menos una última vez. Si volvía a fallar lo dejaría para más adelante, por mucho que quisiera terminar el año con esos dos gemelos juntos y felices.

Acerqué el dedo a la pantalla y pulsé por tercera vez en el After Ending de Ray.