eróticamente enamorada

capítulo VIII

Pensaba en lo ocurrido ayer con Neil y no lograba controlar mis lágrimas, todo iba bien, no lo había visto y comenzaba a distraerme de una manera muy reconfortante con Gustave, aunque sabía que en algún momento debía enfrentar a Neil; no imaginé que de una forma tan violenta y dramática. No estaba de acuerdo con ninguna de las acciones de los dos chicos. En primer lugar la forma de tratarse no era la mejor y a pesar de que mi Ex novio quería mi perdón, no debió aparecerse en el instituto a hablar e insinuar que le diera una oportunidad frente a todos los que estaban allí como si fuese un espectáculo. También sé que Gustave quería protegerme y se lo agradecía pero sí bien vio la actitud de Neil lo mejor que debió hacer era no entrometerse, así habríamos evitado la discusión. En estos momentos estoy muy dolida aunque de todos modos tendré que llamar a Gustave...se lo prometí.

Cuando marqué inmediatamente respondió

- Hola.

- Hola... Gus... soy Annie.- balbuceaba y de una forma casi espontánea el rubor comenzaba a subir por mis mejillas.

- Lo sé. -podría asegurar que sonreía y su voz se tranquilizaba -¿cómo te encuentras?

- Estoy bien gracias, sólo llamaba para que dejaras de preocuparte por mí... Y lo de hoy.

- Imposible dejar de preocuparme por ti, ya lo sabes.- en realidad no lo sabía. Aún pensaba que había sido enviado a mi vida por medio de Clarie y Logan pero su voz me inspiraba confianza y lo decía muy serio.

- Bien, debo irme, buenas noches.

- Gracias por cumplir tu promesa adiós, Annie, nos vemos mañana.- colgó.

«nos vemos mañana» ¿a qué venía eso? El día de intercambios era sólo uno semanal en el instituto y luego de eso yo debía irme al trabajo. Laboraba de secretaria en la biblioteca de la ciudad; para mí ese era el trabajo perfecto ya que los libros son mis compañeros favoritos en el tiempo libre y aquel lugar se asemejaba al paraíso. De todos modos dudaba mucho que una persona como él fuera a ese tipo de lugares y además que le agradara leer, así que desconocía totalmente alguna oportunidad de encontrármelo.

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El despertador sonó a las 6:30 a.m y no tenía ánimos para asistir al instituto, aún tenía demasiado sueño y parecía haberme dormido una hora antes de que amaneciera, mamá estaba dormida y traté de adecentarme lo más rápida y silenciosa que me era posible, cogí mis llaves y en ese preciso momento, Logan pasaba por mi en su Audi.

- Buenos días Annie, te llamaría preciosa pero lamento decirte que pareces estar saliendo recién de una discoteca.

- Buenos días precioso amigo y yo lamento decirte que ayer fui la heroína que trató de separar una pelea y no he podido completar mis horas de descanso correspondiente. - Sonreí irónicamente y él soltó una carcajada.

- Está bien, preciosa. Lo entiendo, pero aún así deberías darte un retoque.-me miraba frunciendo el ceño pero ocultaba una sonrisa y tenía razón, saqué mis escasos accesorios de maquillaje y los apliqué en mi.

Llegamos al instituto y Clarie estaba esperándonos en el pasillo.

- Hola chicos, ¿qué tal?

- Pésima noche para Annie y gran susto para mi ésta mañana.

Todos reímos

- Annie, cuando llegué aquí escuché rumores de que han suspendido los días de intercambios por tres semanas, una lástima para mí ya que no podré conocer chicos por culpa de tus dos enamorados.- Clarie hizo puchero y yo rodeé los ojos.

- Fíjate en lo positivo nena, ya no tendrás que verme en mi habitación con un helado y películas cursis.

- Oh si, eso es hermoso.- sonreímos y nos abrazamos.