La Artes:La agricola

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Bajo lentamente los escalones debido a sus tacones, hoy sería su primer día en la gran cosecha. Le habían solicitado que fuera formal, a partir de mañana ingresarla en el campo donde llevaría un uniforme adecuado.

Llevaba un vestido pegado con un frunce en el costado dejando un poco de pierna a la vista sin ser vulgar.

Sin dudas Melody aprendió a diseñar a la altura de la ciudad. Y ni hablemos de su colección de boda, era maravillosa.

Les tres hombres estaban desayunando cuando la vieron entrar, Connor le sonrió orgulloso y los otros dos no dejaban de chiflarla.

- Mmm..Preciosa, ¿Crees que podamos cosechar más tomates cuando vuelvas? - Pregunto tomándola de la cintura.

- Todos los q quieras - dejo un pico debido a su labial y Caleb no tardo en atacar esos labios.

- ¡Cal!¡Mi labial! - Chillo la artes haciendo puchero.

Miller sonrió coqueto limpiando el labial esparcido por qué su cara.

- Caleb, no pongas más nerviosa a nuestra chica - Chris agarro una servilleta limpiando a la Artes - ¿Tienes el labial en el bolso?.

La agricola asintió buscándolo, cuando lo encontró Chris lo tomo y con muchísimo cuidado la volvió a pintar.

- Listo mi vida, te vez jodidamente sexy - Le guiño el ojo dándole un beso en la mejilla.

La artes sonrió y lo abrazo. Para luego dirigirse al mayor quien la sentó en sus piernas - Te vez increíble nena, estoy muy orgulloso - La artes no pudo evitar darle un sonoro beso en la mejilla dejándolo marcado.

- ¡Yo también quiero! - Menciono Chris acercando su mejilla a la tardes quien rio antes de repetir la acción.

- ahora me pintas de nuevo - Menciono riendo la artes.

- ¿Puedo yo también? - Dijo con un puchero.

- Claro que sí ven.

Rápidamente el boxeador se acercó contento a la muchacha, la cual luego de marcarlo se levantó para ir a retocar su labial.

- Amor, ¿Vamos? Son menos cuarto - Menciono Connor revisando su reloj.

La agricola asintió tomando su carpeta y saliendo de su casa. Chris le abrió la puerta de acompañante y rodeo el auto para conducir.La agricola frunció el ceño al notar que Connor no manejaría.

- Amor, ¿Te duele el hombro o algo? - Pregunto preocupada, que Connor dejara que alguien más conduzca su camioneta era raro.

- No nena, Chris quería conducir y no voy a hacerte llegar tarde esperando que saque su auto - Se encogió de hombros y siguió tecleando en su celular.

La artes solo sonrió, tenía razón. Volvió a girar a su asiento disfrutando la vista.

Diez minutos después estaban en el estacionamiento de la gran cosecha.

- Bien, los veo en casa. Los amo - Menciono besando a cada uno, para bajar.

Camino hacia la entrada observando como el auto de los Miller se alejaba. Dónde un guardia, le dió la bienvenida antes de indicarle por donde ir.

Entro a su oficina con timidez, estaba algo vacía y sin vida. Pero, en poco tiempo se sentía cálida. Unos golpes se escucharon en la puerta, voltio y sonrió al ver de quien se trataba.

- Buenos días señorita Supervisora. ¿Lista para empezar? - Pregunto Ismael con entusiasmo.

- Bueno días, por supuesto. Pero dime Nicki, lo de supervisora me parece frío - Respondió riendo.