Reencuentro

Capitulo 8

(Capitulo 8)

- ¿Estás seguro? – Pregunto Marco mientras observaba aquel paraje lleno de muertos, probablemente alguna guerrilla.

- ¿Acaso quieres matar a más personas? –

- No-

- Si regresamos esta será nuestra vida, acabar con otros a quienes probablemente si estén esperando en casa –

- Creo que el venir aquí fue una mala idea después de todo – Kyle tomo la mano del moreno, este se sorprendió un poco pero aún así no lo soltó.

- Tal vez si, tal vez no, pero por algo estamos juntos aquí ¿No crees? – Marco sonrió, lo que había visto y vivido realmente no se lo deseaba a nadie, pero el conocer a Kyle fue una de las mejores cosas que le habían pasado.

- ¿Quieres vivir conmigo? –

- ¿Qué? –

- Tu me dijiste que tu único pariente vivo es un tío con el que no te llevas, en mi casa mi familia me dio la espalda ante lo que soy... Podríamos vivir juntos, poner algún negocio pequeño en algún pueblo cercano al lugar donde vivo –

- ¿Crees que estaremos bien? –

- Tu me tienes a mi y yo a ti, creo que estaremos bien –

- Me gusta esa idea – Tomo del rostro a Marco para poder verlo a los ojos – Realmente me gusta mucho – Unió sus labios de forma dulce y tierna, fue un simple roce – Me encantas Miguel... -

- Y tu a mi Hiro... -

Ambos se levantaron con rapidez, cada uno giro a su alrededor notando como estaban en sus respectivas recamaras, como si estuvieran sincronizados se levantaron caminando hasta la cocina y bebiendo un vaso de agua para pasar aquella extraña sensación en la garganta además de que llevaron una mano en su pecho mientras un sonrojo se formaba en sus rostros. En la habitación de Hiro, Baymax abría los ojos y se bajaba de su estación de recarga caminando hasta el escritorio del muchacho, de nuevo vio como aquel pequeño muñeco de papel se movía de su escondite ya que este volvió a ver aquella silueta que perseguía al joven pelinegro.

- Hola, yo soy Baymax tu asistente medico personal ¿Qué clase de criatura eres tú? Mi escáner no logra detectar algún tipo de señal de vida proveniente de ti – El pequeño samurái de papel se puso en guardia tomando su espada, el gran robot blanco extendió su mano poniendo solo su dedo ante el pequeño – Yo no soy peligroso, estoy aquí para ayudar – Dejo su espada poniendo sus manos contra el dedo del robot, Baymax lo quería tomar con su mano cuando el ruido de la puerta atrajo su atención.

- ¿Baymax? ¿Qué sucede? –

- El pequeño hombre necesita algo – Hiro miro a donde su amigo apuntaba, pero no había nada.

- Creo que tu también estas cansado, vamos a dormir amigo – Baymax llego hasta su estación de recarga mirando por la ventana, ahí noto al muñeco despidiéndose de él ocasionando que este levantara la mano y también se despidiera, Hiro no entendía a su amigo, pero todo lo atribuyo al cansancio.

A la mañana siguiente Honey pudo ver como su pequeño "hermanito" tenía un semblante distraído y se notaba bastante pensativo, de hecho, en varias ocasiones tuvo que levantar la voz para así evitar que tuviera algún accidente, por ahora debía de cambiar lugares con Fred en el hospital, pero en cuanto pudiera hablaría con Hiro para averiguar lo que sucedía con él. Unas horas después Baymax solo veía a su pequeño paciente dando vueltas en su habitación sin hacer nada en particular, Hiro se dejó caer de nuevo en su cama llevando una mano a su pecho.