Capítulo 29

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(Capitulo 29)

Tadashi lloraba en la cama siendo abrazado por Honey, él también había sido capaz de ver la vida de Kyle... ¿Por qué la gente fue tan cruel?

- ¿Dashi? –

- Honey... ¿Me amas? –

- ¿Qué clase de pregunta es esa? – La rubia se alejó para tomar su rostro con ambas manos – Claro que si Dashi –

- Y yo a ti – Se sentía impotente al saber que como Tadashi podía tener un amor tan grande y puro como el de Honey sin ser juzgado por nadie, pero como Kyle, ese mismo amor fue la causa de su muerte.

Leo y Kubo seguían buscando a Miguel e Hiro, el poblano se las cobraría bastante caras a su amigo ya que Rosa era insoportable cuando se lo proponía, incluso puso a buscar a una chica tan rezongona como Teodora, ya llevaban casi toda la plaza y su amigo seguía sin aparecer ¿Dónde diablos se había metido? Según Miguel esa noche se le declararía al joven inventor ¿Pero para eso debía de desaparecer?

- ¿Leo podemos sentarnos un momento? – El castaño miro a su acompañante, tal vez el también debería de tener la iniciativa que su mejor amigo.

- Claro – En cuanto vieron una pequeña banca se acercaron a ella disfrutando lo que restaba de aquel espectáculo que realizaban los músicos que aún estaban en la plaza – Perdona que tu primera visita sea así –

- No te preocupes, me he divertido mucho, además conocí muchas cosas interesantes que podré contarle a mi abuelo cuando regrese –

- ¿En verdad? –

- Si, gracias por invitarnos – Kubo era un chico tan lindo cuando sonreía de esa forma, levanto su mano acariciando su mejilla ocasionando que el color carmín se dibujara en sus mejillas.

- De hecho, yo soy el que debería agradecer que aceptaran, me alegra poder estar contigo –

- ¿Leo? –

- Kubo... Perdóname... - Comenzaba a ponerse nervioso, pero quería hacerlo,

- ¿Qué sucede? – Una suave caricia fue dada en sus labios, al reaccionar un poco noto como es que Leo estaba cerca de él besándolo de una forma tan dulce que lo hizo cerrar los ojos disfrutando de aquel momento, iba a pasar sus manos por el cuello del chico cuando este se separó.

- Lo siento... - Se alejo de él colocando su mano sobre su boca.

- Leo... -

- Kubo me gustas mucho, sé que es probable que no me aceptes o que pienses que lo que siento está mal, pero desde que te conozco sé que eres un chico increíble – Kubo bajo la cabeza ya que se sentía un tanto abrumado y nervioso por lo sucedido, aquella acción genero un mal entendido en Leo quien comenzaba a desilusionarse – Perdóname... - Quería salir corriendo del lugar, pero un leve agarre evito que sus ideas fueran llevadas a cabo.

- No... No te vayas... - Kubo estaba demasiado apenado, pero aquel simple beso le removió el corazón de una forma que jamás espero.

- No estas enojado – El más pequeño negó con la cabeza - ¿Te molesto lo que hice? – De nuevo volvió a negar haciendo que Leo sintiera una nueva esperanza de que aquel sentimiento fuera correspondido.

- Nunca me ha molestado nada de lo que has hecho, aunque debo decir que me tomaste por sorpresa –

- Kubo... -

- Déjame hablar primero – El asiático tomo aire mirando al castaño a los ojos donde el poblano pudo apreciar el sonrojo en su piel blanca – A mi... A mí también me gustas Leo, jamás me había sentido de la misma forma con otra persona – El castaño quería gritar y correr al sentirse correspondido, pero lo único que su cuerpo alcanzo a hacer fue a tomar al más pequeño de la cintura y girando con él.

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