Racing With You. [Completa]

Extra: Siempre caminaré contigo.

Extra: Siempre caminaré contigo.

Verano del 2021... 

Veo como mis dos bellos hijos vienen de la mano de sus tíos, Matt y Max.

Se supone que debían lanzar los pétalos pero no le puedes pedir mucho a bebés de dos años.

Me quedo viéndolos todo el camino. Los dos son idénticos pero a la vez tan diferentes.

Aria, inquieta como su madre, viene moviendo sus brazos, apuntando todo a su paso y haciendo preguntas cada segundo, sonrió al pensar en que parece un pequeño pájaro Matt le entrega los pétalos para que los lance. Ella si está cumpliendo su tarea.

Derek en cambio, es una foto, camina tranquilo y dándose el tiempo de analizar todo a su alrededor. Max es quien lanza los pétalos, más de una risa se escucha entre los invitados al verlo hacer eso.

Bien, en conclusión, nuestros bebés son tan hermosos.

Los pequeños ojos azules de Aria dan conmigo y sale disparada al altar. La tomo en mis brazos y dejo un beso en su mejilla.

—Ve con tus tíos y hermano— la dejo en el suelo pero no me suelta— pequeña, no es momento de estar con papi. Derek se comerá los dulces si no vas ahora mismo.

Solo esa frase faltaba para que saliera disparada. Por suerte Malcom aparece cuando ella está lejos. Mi hija lo adora y es capaz de quedarse a su lado todo el día.

—Amigo, me impresiona que ustedes hayan hecho bebés tan lindos, el cabello de Apple y tus ojos son una combinación increíble— Malcom dice cerca de mi oído.

—Mal, cualquiera creería que quieres robar a mis hijos— me río— deberías ponerte en práctica y crear los tuyos.

—Si eso llega a ocurrir te lo informaré enseguida. Me interesa bastante, para ser sincero.

Le dejo saber que es una decisión que deben tomar ambos. Malcom me comenta que lo han hablando con Holly un par de veces pero nunca han concretado nada.

—Oye, cualquiera pensaría que ustedes dos se traen algo— Hakan se pone entre nosotros— los invitados creen que van a salir corriendo.

—Solo lo dices por celos.

—Si hay alguien que debe robarse al novio claramente soy yo.

Lo dice como si fuera obvio. Aguanto la risa y centro mi mirada en frente.

Veo como los hijos de Harry, el quinto, hacen su camino hasta el altar. Primero los recuerdos, luego más pétalos y por último los anillos. Los tres se ven adorables. Hayley detrás de ellos también, intentando que sus hijos no cometan ningún error.

Por cierto, la iglesia está dividida en dos, una parte totalmente pelirroja, familia de Apple, y la otra más variada, con amigos y mis familiares. Estoy pensando en cuán gracioso es eso cuando una melodía llena mis oídos haciéndome centrar mi vista en la entrada.

Mis nervios desaparecen cuando mis ojos dan con mi amada.

La cabellera roja de Apple se asoma y una sonrisa se extiende en sus labios, escanea todo el lugar como buena chismosa que es. Ese simple gesto hace que todas mis inquietudes desaparezcan. Suelto un suspiro cuando su cuerpo completo queda a la vista. No tengo palabras.

Su cabello recogido en un moño cae en unas pocas ondas grandes. No hay velo y no me quejo, su vestido es largo y se ajusta a los lugares necesarios, su escote es de corazón dejando a la vista su hermosa piel. Frunzo el ceño intentando eliminar los sucios pensamientos que estoy teniendo al verla. Pero no puedo.