En cuanto nos quedamos solos con Jagger, él dejo las maletas en el suelo y vino hacía mi, envolviéndome en un abrazo, que en serio necesitaba. A pesar de que toda la situación salió mejor de lo que pensé, no podía evitar sentirme completamente avergonzada, por la manera en que se habían comportado.
¿En serio querían mostrarse como una familia malditamente unida e intentar dejarme como una egoísta? Incluso el idiota de Fred parecía actuar el maldito papel, pero él no sabia lo cerca que estaba de golpear su maldito rostro prepotente.—¡Rayos Rainy! tu familia si que es… —no hacia falta que lo diga, lo sabía muy bien, había vivido hasta los dieciocho años con ellos.
—¿Jodidamente intensa? Lo sé, no solo eso, son unos hipócritas egoístas. Pero al menos se encuentran aquí, la tía Gema y el tío Richard, ellos son los mejores. Cuando me fui de este infierno, me jure no tocar un solo centavo de mi padre y lo cumplí, tú sabes que conseguí varios empleos, pero aún así no era suficiente para costear la carrera. Fueron mis tíos quienes me ayudaban, de no ser por ellos, no estaría donde estoy. —nunca hubiera podido encargarme de todo sola.
—Al menos alguien es sensato. Por cierto ¿Qué demonios le viste a ese idiota? Estaba justo a tu lado y no le importo mirarte de manera lujuriosa, un idiota.
—Lo es, ¿Escuchaste lo que me dijo? No podía creer su maldito descaro, el idiota me engaño, con mi jodida prima y encima me coquetea frente a ella.
—¿Quieres que lo golpee, pequeño girasol? —oh sí, esperaba que lo hiciera.
—Después, ahora quiero agradecerte por no abandonarme, no hubiera podido sobrellevarlo tan bien. En serio te debo una muy grande, te quiero demasiado.
—Si tanto me quieres ¿Por qué no me besas?
—¿Por qué quieres que te bese?
—Porque si, vamos Rain será divertido, prometo que te gustara. —eso no lo dudaba y ese era mi miedo, no quería perder a mi mejor amigo.
—Jagger estoy cansada ¿Por qué mejor no tomamos un baño e intentamos descansar un poco?
—Si que eres traviesa, te niegas a darme un simple beso y quieres que nos bañemos juntos. No me opongo, me gusta como piensas. —él se estaba burlando, lo sabía, conocía esa mirada.
—Ya, tonto. —tome una de las almohadas y no tarde en golpearlo.
Lo que comenzó como un juego, paso a ser una guerra, cuando Jagger tomó su propia almohada y comenzó a hacer lo mismo que yo. No podía evitar reír, me sentía nuevamente como una niña.
—¡Ya, me rindo, tú ganas! —exprese, dejándome caer en la cama. — Ahora vamos empatados, yo gane en las cartas y tú en la guerra de almohadas.
—Bueno deberé cobrar mi premio. —sonrió, antes de dejarse caer sobre mi.
Estábamos tan cerca, que podía sentir su colonia aún en su ropa. Con su mano derecha, alejo los rebeldes cabellos que caían por mi rostro, antes de comenzar a bajar su rostro al mío
Estaba decidido, iba a besar a Jagger Vanderham. Quise detenerlo antes, pero ahora sentía curiosidad.
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Jugando con Jagger
Teen FictionSolo veinte días... Rain sabía que no podía llegar al infierno que era la casa de sus padres, sola. Pero ¿A quién podría llevar? Sus últimas citas habían sido un completo desastre, dejándola con casi ninguna opción. Pero dicen que a problemas desesp...