El principio es el fin y el fin es el principio

12. Planeando la broma del siglo

❝Capítulo doce: Planeando la broma del siglo❞   

Y llegó el día más esperado por todo el colegio, el día del partido Gryffindor vs Slytherin, iniciando los partidos por la copa.

Estos dos equipos ya estaban preparados en los camerinos, esperando salir y hacer su entrada triunfal, mientras que en las tribunas se encontraban todas las casas, en sus respectivos lugares, preparados para animar a alguno de los equipos que jugarían en el momento.

Los primeros en salir fueron los Slytherin, con su brillante uniforme verde esmeralda, acompañado de detalles plateados, distinguidos por los complementos de Quidditch que portaba cada uno, estos, adecuados en la posición de juego a la que pertenecían.

Su entrada al campo fue totalmente sorprendente, se elevaron en fila, como si fuera un elegante desfile, sacaron sus varitas y en el aire hicieron aparecer el escudo de su casa, el cual brilló por algunos minutos y se desvaneció mientras ellos volvían a sus lugares.

Después de que esto salieran, inmediatamente ingresó Gryffindor, los cuales, al situarse frente a Slytherin, alzaron varitas y lanzaron un hechizo, el cual hacia que en el cielo salieran chispas rojo escarlata y dorado, formando una pequeña lluvia de estos colores, para que luego saliese un león rugiendo, terminando con el escudo Gryffindor, desvaneciéndose poco a poco, mientras ellos volvían a sus lugares.

— Amigos, esas fueron las presentaciones de los dos equipos, magníficas, sí, pero sinceramente la de Gryffindor fue mejor... — habló el joven Michael.

— ¡Jordan! — exclamó McGonagall, por lo que, miró con miedo, pero continuó.

— Y con esto damos iniciado la Copa de Quidditch, ¡que gane el mejor! — exclamó el moreno, un tanto intimidado por Minerva.

La profesora, Rolanda Hooch, la cual hacia de árbitro, dio inicio al partido.

— Y empezamos con Slytherin, los cuales sus cazadores atraparon la Quaffle..., pero... rápidamente la consigue Gryffindor, los cuales se acercan al aro, intentando anotar, pero... las serpientes lo detienen, me cuesta decirlo, felicidades por su trabajo al guardián de Slytherin — hablaba el muchacho, algo desalentado por lo que había pasado.

El partido siguió, dejando en los primeros treinta minutos un gran resultado en el marcador, 120-100, a favor de Slytherin.

— Al parecer..., ¡el buscador de las serpientes a visualizado la snitch! — exclamó Michael con algo de preocupación en su voz. — pero por suerte, nuestra buscadora, la cual muy atractiva, por cierto, está yendo tras él —

— ¡Jordan! — exclamó de vuelta la profesora.

— me disculpo, pero solo digo la verdad —

— ¡Jordan!, ¡basta!, vas a perder tu puesto de comentarista — avisó la profesora algo disgustada.

— bien... — suspiró — los buscadores van hacia la snitch, el Slytherin cae en picada para conseguirla, pero Gryffindor no se queda atrás..., ¡Eso fue un Amago de Wronski!, ¡Pero claro que nuestra buscadora no cayó en esa trampilla..., Pasando a los cazadores, ¿Acaso eso es el famosísimo Woollongong Shimmy?, ¡Gryffindor se ha salido con la suya! Dejando marcador 120-110, Serpientes, preocúpense que los leones están comiéndoles los talones... — narró con todo el entusiasmo posible. — oh no..., por suerte nos salvamos de quedarnos sin jugador..., ¿Qué fue eso?, ¿acaso Slytherin anotó?... ¡Las serpientes anotan!, 130 a 110, Leones... no dejen que los venzan...— y así, siguió narrando.

El partido siguió, por el momento Gryffindor iba en desventaja, lo cual necesitaban anotar más o que su buscadora lograra atrapar la snitch.

— El partido está siendo reñido, pero..., ¡Gryffindor vio la snitch! — exclamó con furor — pero Slytherin tampoco se queda atrás, este deberá volar más rápido porque Gryffindor ya esta por alcanzarla... — terminó de hablar, dejando en suspenso el partido — ¡Gryffindor atrapó la snitch!, repito, ¡Gryffindor atrapó la snitch! ¡150 puntos más para ellos! Lo que nos dejaría con... — paró un momento para hacer los cálculos — ¡260 puntos!, ¡Los leones obtienen la victoria de este primer partido! — se expresaba de lo más emocionado.