El principio es el fin y el fin es el principio

13. No lo siento, Slytherin

❝Capítulo trece: No lo siento, Slytherin❞   

El dúo junto con el equipo se pasó toda la mañana entrenando, la mayoría de estos quería que ya terminara el primer bloque, para el cual no faltaba casi nada, por lo que, cuando terminó, todos se dirigieron a asearse.

Los amigos hicieron lo mismo y sin esperar más, se dirigieron hacia el Gran Comedor. Al llegar allí, los dos buscaron con la mirada a sus amigos, los cuales no localizaron, por lo que supusieron que se habían quedado dormidos, así que decidieron ir a su sala común.

Los jóvenes, se dirigieron hacia sus habitaciones, por el lado de la joven, en busca de Lily, la cual, al entrar, solo visualizó al hurón, así que consideró que la pelirroja debía estar paseando.

Cuando esta se acercó al pequeño, el cual se encontraba despierto, lo cargó y decidió en ponerle un suéter navideño, el cual se trataba de uno color azul marino y un pequeño muñeco de nieve, Euphemia sí que tenía talento para esto, aparte, al parecer le había agarrado mucho cariño al Gryffin.

Mientras bajaba con el pequeño en brazos, encontró a su amigo, el cual, al parecer no se había retirado, tal vez este quería ver a la pelirroja, dato que la joven no pasó por alto.

— Jamie, Lily no estaba — dijo riendo

— ¿Ah?, ¿Qué?, no, no... yo no, si eso, no... — respondió el ojiavellana, trabándose con cada palabra que decía.

— Entiendo, enamorado de la pelirroja, pero ahora no estamos para eso, ¡vamos a despertarlos! — exclamó con alegría, y así, estos dos se dirigieron hacia la habitación de sus cuatro amigos.

Al ingresar, en efecto, los tres estaban durmiendo, por lo que pensaron en cómo podrían despertarlos, tal vez con un Aguamenti, pero también estaba la opción de tirarse encima, aunque ninguna de estas dos los convencía totalmente, por lo que optaron en hacerles cosquillas.

Estos, antes de atacar, tuvieron una épica batalla de piedra, papel o tijera, para ver quien despertaba a quien, en la cual quedaron en que James despertaría a Remus y ______ despertaría a Sirius, dejando así a Peter, el cual probablemente se despertaría con el ruido.

Aunque la joven, cuando ya estaba preparada, aunque en último momento, pensó en despertar al azabache de otra forma, susurrarle algo en el oído. Ella sabía que esto le daría un cosquilleo, aparte, estaba enterada que él ojigris tenía un sueño ligero.

Y así lo hizo, haciéndolo despertar de salto, lo cual, ante esa reacción la joven se movió rápidamente con Gryffin en brazos, no quería que saliera volando el pequeño hurón.

En cambio, James solo le hizo cosquillas a su objetivo, el cual, se despertó gruñendo.

— ¡James! — bufó el castaño, pero continuó al notar la presencia de su amiga. — ¿No me pudiste despertar tú? — preguntó este hacia la joven.
— Si querías quedar atontado como Sirius, ella lo pudo hacer — se defendió el ojiavellana mientras reía.

— Bien, ya pasó, ahora vamos al Gran Comedor que tengo hambre — agregó la joven.

— ¡Gryffin! — gritó Sirius al notarlo, estirando sus brazos para que su amiga se lo pasase.

— Después — contestó la joven al ver la acción del azabache — primero lávense la cara que parecen orcos — rio por lo último, aunque, por esto, sus amigos se quedaron expectantes, ya que no sabían de que hablaba.

— ¿En serio no conocen El Señor de los Anillos? — preguntó, aunque se contestó después de unos segundos — No, no contesten, sé que no, para navidad les regalaré La comunidad del Anillo, y si les gusta, tal vez les regale los siguientes — sonrió y se acordó de algo — ¿saben?, yo le iba poner Tolkien a Gryffin, en honor al escritor —