No te alejes de mi [COMPLETA] [MPF#1]

Cap 33

Los chicos y yo fuimos en el coche de Adrian a un nuevo bar, una recomendación de él.

No pude evitar sonreír al imaginarme a mi novio en un bar, sucede que Adrian es tan... refinado que es imposible imaginarlo bebiendo alcohol.

—Gracias por acompañarnos, sé que tal vez te aburra la idea de estar con nosotras en una fiesta por ser menores que tú pero...

—¡Ey! — exclamó tomando mi mano —no me aburre pasar tiempo con ustedes, la verdad es divertido y me encanta pasar tiempo contigo, donde sea.

Sonreí y me acerque para darle un beso en la mejilla.

—Diabetes —murmuro Clara divertida.

—¿Jason y Alex vendrán? —dije con algo de picardía en mi voz. Veamos quien da más diabetes.

—Si, Alex ya esta llegando.

—Jason ya llegó —dijo Clara con una sonrisa de enamorada. 

—Cuidado que se te cae la baba —bromee girandome hacia Clara.

Clara me miro y sus mejillas se tornaron color carmesí.

En todo el camino íbamos cantando y riendo sin parar, la verdad es que me divierto mucho con mis amigos y mi novio, se que es raro sale con tu profesor o ex profesor pero no saben lo enamorada que estoy de Adrian.

Adrian bajo del coche y lo rodeo hasta llegar a mi puerta y abrirla. Extendió su mano hacia mí y yo la acepte gustosa.

—¿Lady de dieciocho? —Solté una carcajada.

—Gracias caballero.

Caminamos tomados de la mano hacia el bar y cuando ya estábamos cerca de la entrada me dio miedo ¿Que tal si no me veo de dieciocho? Debí traer mi otra credencial por si las dudas.

Adrian noto mi nerviosismo y apretó levemente mi mano.

—Tranquila, hermosa.

Sonreí en respuesta y caminé hacia la fila pero Adrian me tomo de la cintura y se acercó al guardia.

—Hola Esteban.

El guardia que tenía cara de pocos amigos sonrió.

—Adrian —dijo saludando con un asentamiento  de cabeza y seguidamente quitó la cinta roja de la entrada y nos dejó pasar.

Adrian me hizo a un lado con su mano aún en mi cintura y dejo pasar a mis amigas primero, después me dejó pasar a mi y al final él tomando mi mano.

Lo guíe hasta la barra y cuando por fin llegamos me senté en un banquito, Adrian me rodeo en un abrazo por la cintura sintiéndose a lado mío.

No se porque pero este día está algo posesivo. Y eso me gusta.

—¿Qué quieres de tomar, linda?

¿Linda? Nunca me dice así, me dice princesa, hermosa, pequeña pero ¿Linda?

—Eh... Una cerveza por favor.

—Dos cervezas por favor —dijo al barman que estaba del otro lado de la barra, quien me miraba con una sonrisa.

—Idiota —murmuro molesto cuando el barman fue a buscar las bebidas y yo reí.

—¿Qué sucede contigo hoy lindo? 

Adrian me miro fingiendo molestia y después acuno mi cara entre sus manos para después besarme. Un carraspeo nos hizo separarnos y sentí que el color subía por mis mejillas.