Something About You | Frerard

Vigésima Parte - Capítulo Final.

Después de la pelea con Lindsey, decidí que lo mejor era distanciarnos, así que me fui al antiguo departamento, para que cuando Frank saliera del hospital, se viera habitado.

Tomé mi ropa y la metí en una maleta, algunos zapatos, las cosas de mi trabajo y algunos libros, me fui, dejando a Lindsey atrás, ella gritaba cosas e insultos, estaba en todo su derecho.

La semana de observación de Frank pasó rápido, yo iba a visitarlo todos los días, llevándole pequeños detalles, su sonrisa era todo lo que necesitaba para reconfortarme y saber que todo estaba bien con él y conmigo, por ahora que no sabía la verdad.

Un día antes del alta de mi pequeño, decidí limpiar el apartamento y hacer la despensa, comprando muchas verduras, frutas y comida chatarra que le encantaba a Frank, quería consentirlo y ahora que tenía dinero, podía hacerlo.

Últimamente había pintado demasiado, tal vez era porqué estaba muy feliz al saber que Frank aún me amaba y que podíamos ser felices. Pero después recordaba a Bandit, y ella era lo que más me dolía, porqué después de una semana me di cuenta de lo perra que era Lindsey.

El departamento olía a pintura, cuando salí para ir a buscar a Frank del hospital, deje las ventanas abiertas para que el pequeño espacio se ventilara, dejando afuera el olor. Estaba nervioso, hace años que Frank y yo no estabamos juntos y completamente solos, y menos en este departamento, en donde nos conocimos.

Cuando llegué al hospital en la camioneta, me estacioné en el lugar más cercano, pues Frank si podía caminar pero yo no quería que hiciera demasiado esfuerzo. Así que después de estacionarme, me bajé rápidamente y casi corriendo entre al hospital, estaba ansioso y feliz, por fin Frank salía de esta maldita prisión.

Cuando entré a la habitación vi a Frank sentado en la cama y su pies casi tocando el suelo, él sonrió y después de una semana de estar distanciados, él caminó hacia a mí y me besó.

Las mariposas invadieron mi estómago, hace años que Frank no me besaba y hacía años que no me sentía así de feliz, el remolino de alegría invadió mi cabeza, provocando que gotas saladas salieran de mis ojos verdes.

Había extrañado demasiado a mi enano, yo correspondí el beso y jugué con su cabello, que ya estaba demasiado largo, pasé mis manos por su pálida y delgada cara, acariciando cada una de sus facciones, él tenía una barba que me hacía cosquillas, así que durante el beso me reí y él también lo hizo.

Segundos después de aquél primer beso, tocaron la puerta, y después la abrieron, era el doctor. Él nos miró y después sonrió.

- Vaya, después de tanto tiempo, al fin los veo juntos y eso es bueno chicos. - El doctor palmeo mi espada y después la de Frank - Ahora, las instrucciones para que tu novio tenga una recuperación sana, son las siguientes: tiene que estar en reposo, tomar las vitaminas y los medicamentos que le estamos recetando e ir activándose poco a poco, pero eso será después, porqué ahora necesita descansar.

Frank me abrazó y yo lo rodee con mis brazos, él metió su cabeza entre el hueco de mi cuello y mi hombro, haciendo que su respiración me diera cosquillas.

- Muchas gracias por todo, doctor. - Yo le tendí la mano, él la estrecho y después abandonó la habitación.

Y yo suspiré, al fin Frank estaba fuera de este hospital y por fin vería la luz del sol, y se quitaría ese horrible color pálido.

Frank tomó mi mano y comenzó a caminar hacía la salida, apurandome a salir.

- Ya quiero largarme de aquí - Su cara mostraba una pequeña sonrisa traviesa y juguetona, yo me contagié de ella y también sonreí.