Nuestra Vida En París //Sasusaku, Shikatema, Saiino, Gaamatsu, Naruhina, Nejiten

Capítulo 21

—Sasuke...

—Te amo —echó uno de los mechones de ella, de cabello, atrás de su oreja—, Sakura.

—¿En serio fue verdad todo lo que me dijiste en las cartas? —lo miró a los ojos —. ¿Sobre qué me extrañabas?

—Cada palabra, molestia.

Sakura insegura, besó sus labios con dulzura.

—Te... estuve esperando tanto tiempo, años... con ansias de que...

—Nos casaramos, yo quería casarme contigo. Por eso me fuí, por tí, para poder darte mucho más.

—Cuando llegó mi período... —dijo con pena—, esperaba que regresaras para poder darte un hijo.

Sasuke recorrió sus labios por los pechos de Sakura, hasta su cuello y labios.

—Quiero más de tí...

—Ámame —decía—, Sasuke...

—Dí que eres mía.

—Soy... -Sasuke apretó uno de sus senos sacándole un gemido que lo enloqueció—, completamente tuya, Sasuke.

De repente se escucharon los ruidos de un carruaje, ¡sus padres habían llegado finalmente de su pequeño viaje! Sabía que llegarían ese día pero no tan temprano. Ambos se levantaron y se vistieron rápidamente.

—Sakura... —la besó apasionadamente, tomándola de las mejillas con ambas manos—, casemonos.

—No lo sé...

—¡Sakuraa! ¡Ya llegamos mi cielo! —dijo su papá entrando a la casa.

—Mis padres pueden darse cuenta de que estás aquí, no quiero que hagan un escándalo, vete por favor.

—Lo que ha pasado a sido un malentendido, Karin está enamorada de mí, date cuenta, nos odia porque tú y yo estamos locamente enamorados uno del otro. No quiere vernos felices.

—No quiero hablar de eso, vete, Sasuke —alejó sus manos pero Sasuke volvió a tomarla y a besarla ferozmente.

—¡Sakura! ¿Estás despierta? —gritó su padre subiendo las escaleras. Sasuke la besó por última vez y salió por el balcón, procurando que nadie lo viera. Kizashi abrió la puerta, felizmente viendo a Sakura levantada en camisón y bata—. Hija, me da gusto verte.

Su madre entra para verla con alegría.

—Sakura, ¿estás bien? Pareces exaltada.

—E-estoy feliz de verlos, mamá, papá.

—Que bueno, porque te traje muchos regalos, voy por ellos —su papá salió de la habitación.

—Esta cama está hecha un desastre, déjame ayudarte —su mamá le quitó la cobija a la cama dándose cuenta de la mancha de sangre en la cama. Sakura palideció, no sabía que decir, su mamá se había dado cuenta de lo que había pasado—... Ay, Sakura, te vino el período.

¡Gracias a Dios!

—S-si, mamá... —dijo nerviosa.

—Bien, ayúdame a quitar la funda para quitar la mancha.

Sakura suspiró, decidida a ayudar a su madre a lavar la mancha de sangre; dónde quedó su inocencia.

• • •

Temari corría por toda la ciudad junto a su hurón; siendo perseguida por Yahiko y los soldados.

—¡Ven acá! ¡Gitanilla! —dijo Yahiko persiguiendola en su caballo. Sasori y Deidara lo seguían al paso para atrapar a Temari—. ¡Serás mía!