Artista » KookTae

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No podía seguir retrasándolo, lo supo cuando incluso con el cuerpo dolorido sus ojos se abrieron en la oscuridad, automatizado.

El frío del invierno le golpeó el rostro tras abrir la ventana, no notando que lo gélido de sus manos no se debía únicamente a su debilidad física. Se las arregló para caer de pie y cuando levantó la vista para encontrarse con los ojos negros de Jungkook ya observándolo desde antes, se sintió temblar.

El pelinegro no corrió al verlo (como había soñado reaccionaría al reencontrarse), sino que esperó pacientemente a que el pelimiel llegase hasta él, con el corazón alterado y los ojos húmedos.

No preguntó pero lo entendió todo con solo una mirada. Abrió sus brazos y Taehyung se dejó consolar, lloró tan fuerte que la marea se alteró y el viento se congeló. El mundo entero se paralizó por el niño que sollozaba en lamento.

Se abrazaron hasta que el cielo tronó y lloró junto con él, motivo por el que a duras penas tuvieron que correr a resguardarse dentro de la habitación del menor. Y por un demonio que Taehyung habló, entrecortado y gimoteando dejó salir todo lo que le carcomía la cabeza; culpas y arrepentimientos por montones.

Jungkook supo entonces que su precioso niño ojitos de miel estaba oficialmente roto, nada le preocupó tanto como la neblina en sus pupilas y el humo en sus pestañas.

En medio del dolor, Taehyung había vuelto a besarle buscando auxilio. No hubo estrellas ni fuegos artificiales como la primera vez, no se sintió derretir enamorado, pero sí que encontró la fuerza suficiente para continuar unos días más. Para seguir respirando aunque doliese, pues con Jungkook sosteniéndolo todo era más sencillo, más soportable.

Pero la tranquilidad se le esfumó al ver a la pelinegra despertada por el llanto de pie en el marco de la puerta, viéndolo.

Esperó gritos, regaños y hasta un golpe, pero en su lugar y para su asombro la mujer cerró de nueva cuenta la puerta y se marchó. Aún en brazos de Jungkook, el pelimiel pensó que aquello era la prueba irrefutable de que ella seguía sin preocuparse mínimamente por él. Que todas las nuevas atenciones eran para no herir su ego demostrando lo mala persona que era.

Del otro lado de la puerta, la mujer caminaba de regreso a su habitación preguntándose porqué Taehyung hablaría solo.

[...]

A LA VERGAAAA