𝗢𝟮𝟰. the blindness in the eyes

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𝟎𝟐𝟒. LA CEGADEZ EN LOS OJOS

Astrid siempre fue una niña callada, una chica que a pesar de todos los malos tratos que recibió en el colegio, siempre tenía aquella sonrisa tímida dibujada en la cara, sus padres la criaron bien, unos señores que siempre se esforzaban por tener ...

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Astrid siempre fue una niña callada, una chica que a pesar de todos los malos tratos que recibió en el colegio, siempre tenía aquella sonrisa tímida dibujada en la cara, sus padres la criaron bien, unos señores que siempre se esforzaban por tener a su única hija feliz, puesto que la señora Mercedes no pudo volver a conceder más hijos, sin embargo siempre fueron felices con verla feliz, eran los tres mejores amigos a pesar de todo. Ellos querían que su hija creciera sanamente, y haciendo lo que más amaba. Su padre era leñador, y su madre alguien ocupada, que de vez en cuando le gustaba la fotografía, pero siempre pendientes a su pequeña niña.

Cuando la madre de Astrid murió, no hubo un solo día en que le lloraran, era una mujer tan fuerte y hermosa, que a pesar de que todos veían venir lamentablemente su muerte, siempre la recordarían, no solo por su belleza, si no por lo gran mujer que fue. La familia de Mercedes—madre de Astrid—odiaba a James—padre de Astrid—por el simple hecho de tener un trabajo tan pobre, sin embargo, Mercedes amaba a James y nunca lo dejaría solo porque su familia lo odiaba. El amor que ellos tenían había sido tan sincero, que aún Astrid lo recordaba.

Y de su amor, Astrid dió fruto, dando a conocer a una chica que no importaba cuanto el tiempo pase, ella siempre va a pensar en los demás antes que ella, así que mientras abrazaba por última vez a Benny, solo pudo pensar en Beth, en aquella única amiga que tuvo y que tiene, aquella niña prodigio que conoció en el orfanato, que la apoyó en todo momento desde que se volvieron a encontrar, anoche ni siquiera pudo dormir bien por estar pensando en ella, creía que los pensamientos preocupantes desaparecerían, al menos por un tiempo, sin embargo no pasó bien unos días y ahora su mente estaba hecha un lío otra vez.

—Me llamas, ¿sí? quiero saber como esta Beth—Benny sujetó la cintura de su chica mientras ambos compartían contacto visual, Benny no quería dejarla ir, pero el sabía y entendía que Beth estaría pasando por un mal momento—Recuerda que debes de entender que esta pasando por un mal momento, al igual que tú. Solo que ella...—suspiró pesadamente evadiendo la mirada—No se esta dejando ayudar de ninguna manera, ¿estás segura de que no quieres que vaya contigo?

—Sí, la entiendo. Pero...es frustrante no saber que pasa por su mente, aún así conociéndola—hizo una mueca, entristecida, Benny la abrazó más fuerte por la cintura, apegándola a el al ver aquella expresión—Solo estaré allí unos tres días, no te preocupes en serio, es algo de lo que debo encargarme yo. Pero te mantendré al tanto, y prometo que te llamaré, cariño—le sonrió antes de besarlo, mientras enredaba sus brazos en su cuello, Benny la sujeto más fuerte de la cintura, ambos no querían separarse, pero el único pensamiento que abarcaba la mente de ambos era Beth, no solo Astrid estaba preocupada por la pelirroja, si no que también Benny, desde la última llamada que Beth le contestó no había parado de pensar en ello.

✓ 𝗦𝗔𝗩𝗘 𝗬𝗢𝗨𝗥 𝗧𝗘𝗔𝗥𝗦 ━━ benny wattsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora