Capitulo 6: La figura detrás de mí

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En el fondo de un oscuro océano.
No puedo escuchar nada.
No hay nadie.
Oscuro. Estoy...en el fondo de un océano oscuro.
Estoy solo.
En un momento así, el pulsante sonido del teclado, también el sonido del violín, puedo oír todo eso.
Maldición. Maldición.
Estoy sumergido tan profundo. ¿No se romperá el piano?
¿Por qué? ¿Por qué?
Yo no...puedo oír el sonido del piano.
El piano esta dañando esta presentación.

Después de unos minutos tratando de tocar ,al ritmo de Kaori, el piano...
Dejé de tocar, puse mis manos en forma de puño en mis piernas, y me quedo con la cabeza baja.
Lo siento. Lo siento. Si esto continúa... Si continúo tocando.
Si yo. Toco para ti, seré una molestia.
Para ti...
Cierro los ojos y trato de ignorar los murmullos del público sobre de que paré de tocar.
Pero, en intantes abro los ojos, y me doy cuenta que...Kaori paró de tocar, y bajo su arco, como si hubiera terminado, pero no es asi.
Los murmullos suben un poco más las voces, se convierten a gritos, gritos de todo el público.
-¡¡¿¿POR QUÉ TE DETIENES??!!
-¡ES EL FINAL DEL CONCURSO!
-¡NO TRAIGAS UN ACOMPAÑANTE TAN MALO!
-¡ESTARÍA BIEN SIN ÉL!
Miro a Kaori, ella no se mueve, acepta los gritos del público. Sus palabras de antes, comienzan a pasar por mi mente.
"Está bien. Si somos nosotros, podemos hacerlo."
"Te designo como mi pianista."
"No sirve de nada si tú no tocas."
"¡Pero tú estás bien!"
"Tocaré con todo lo que tengo, para que el público no me olvide."
Ella voltea a verme, su cara esta cubierta de sudor, pero...ella mostraba una sonrisa mientras me miraba.
-De nuevo. 
"Soy una música."
Puede que hasta ahora sólo haya sido un viaje en la oscuridad.
Pero ella siguió creyendo que yo avanzaría.
Aunque es sólo un poco, la estrella ilumina mi camino.
Ahora, empezemos un nuevo viaje.
Kaori se pone en posición nuevamente, levanta su arco, lo pone encima de las cuerdas del violín y comienza a tocar.
Desde Re mayor...
Yo...sigo sin tocar, no puedo tocar, lo arruiné todo.
Por ti. Por ti. Otra vez, estoy buscando excusas.
"Si somos nosotros, podemos hacerlo."
En tus ojos, había determinación. Entonces, qué pasa conmigo reflejado en esos ojos.
"¿Acaso no estoy aquí? Levanta la cabeza. Mírame."
Y es lo que hago. Levanto la cabeza y la miro.
Miro a Kaori tocar frente a muchas personas, sin siquiera parar.
"Mírame."
Decidí tener determinación.
Comienzo a tocar, sin sincronización, pero lo lograremos, nosotros, podemos hacerlo.
Concéntrate. Concéntrate. Concéntrate.
El sonido y la partitura. Conoces su estructura, aún si se desvanece.
Durante una semana, la partitura estuvo siempre frente a mí. Yo estaba escuchándola siempre durante el receso.
Dejaré salir lo que hay dentro de mí.
Concéntrate. Concéntrate.
Pero, las palabras de mi madre, comienzo a oírlas.
"Ecucha, Kousei."
"Kousei. No toques tan violentamente. El piano eres tú. Si lo tocas gentilmente, sonreirá. Si lo golpeas duramente, se enfadará. Es como acariciar la cabeza de un bebé. Una vez más. Estrellita dónde estás."
Si no puedo oír el sonido.
¡Lo imaginaré!
El sonido está dentro de mí. Sacaré lo que mi madre me dejó.
Comienzo a tocar algo más fuerte, noto que robo las miradas de todo el público, y también, que están con una reacción de sorprendidos.

Narrador

"Oye, oye. Amigo A. No me robes el protagonismo." Pensaba Kaori mirando de reojo como tocaba Kousei.
"Su primera batalla...ha cautivado por completo el auditorio." Pensó un juez mirando como Kaori y Kousei tocaban sin parar, y por fin, sincronizados.
-¡KYAA! ¡KOUSEI, KAORI! ¡FANTÁSTICO! -grita Tsubaki parandose de su asiento y extendiendo sus brazos hacía arriba.
-Hermoso. -Watari se sonroja un poco mientras miraba a aquellos músicos que tocaban sin descansar.
Kaori y Kousei se miran de reojo por un segundo, vuelven la vista hacía sus instrumentos, y sin parar de tocar.
"No está acostumbrado así que es natural. Él...no es un acompañante. Igual que ella...él es un músico." Pensó el mismo juez de antes.

Kousei's POV

Empujándome hacía adelante. Fuertemente, como un latido. Puedo escuchar tu sonido, estás aquí.
Recuerdo, como en un receso,  que escuché ese sonido del piano, cerré mis ojos, extendí mis brazos y moví mis manos junto con mis dedos, como si estuviera tocando el piano, luego los abrí y dijé:
"Muy pronto terminará abril."
Terminamos de tocar y al momento de ver al público, todos, se pararon y comenzaron a aplaudir, veía muchas sonrisas, muchas manos hacía arriba, ellos, están orgullosos de haber mostrado nuestro talento, nuestra música.
Aire acondicionado seco. El aroma del orgullo.
Comienzan a salir lágrimas de mis ojos, pero no era el único, también a Kaori le comenzaban a salir lágrimas, ambos sabemos que estas personas no olvidarán la música que acaban de escuchar, no olvidarán los intrumentos que se usaron, no olvidarán a los músicos que los tocaron, no nos olvidarán.
Empezamos un viaje.

Tu mentira en AbrilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora