Parecía un ángel. Juro, sin exagerar que parecía un ángel. Entre el malestar, pude abrir mis ojos para ver la presentación de Jimin. Jamás lo había visto tan bonito, tan elegante.
Jimin patinaba al son de una música preciosa a piano, con un vestuario completamente blanco y una tela del mismo color. Tenía entendido que había habido un tiempo donde Jimin había hecho ballet, pero nunca lo había visto tan claro hasta ahora. Sus movimientos eran perfectos, aunque la gente diga que la perfección no existe, para mí, la perfección es Jimin.
Cuando digo que al saltar se convertía en un ave, me refiero a que giraba en el aire como si no fuese nada, aterrizando con un polvo de hielo elevándose de la pista. Era impresionante.
Al parecer, no era el único que se había quedado boquiabierto. Todos en el pasillo miraban la presentación de Jimin como si estuvieran viendo a un ser sobrenatural.
- ¿Ese no es el chico que se cayó tantas veces en el Grand Prix de Helsinki? -murmuró alguien sorprendido.
- No tengo ni idea, pero va a ser imposible sacar más puntuación que él. Su programa es... -hizo una pausa, buscando una palabra para describirlo-. Simplemente perfecto.
Me alegraba que no fuera solo yo. Jimin estaría muy orgulloso de su trabajo en la rehabilitación si viera las caras de esas personas que estaban mirando. Hace un mes, Jimin no podía aterrizar ningún cuádruple debido a su lesión, ahora estaba clavando todos, TODOS los saltos.
- Creo que ese es el mejor programa que le he visto patinar nunca -musitó Namjoon, mirando fijamente la pantalla.
Cuando Jimin me había anunciado que debía ir a buscar a Namjoon, lo primero que hice al salir del baño fue hacerle caso. Namjoon me había dado un par de pastillas, y cuando me las había tomado justo empezó el programa de Jimin. Todavía no me habían hecho efecto, pero ya me sentía mejor. No sabía como iba a agradecerle a Jimin todo lo que había hecho por mí.
- Es increíble -respondí en un susurro.
Hablábamos bajito, como si no quisiéramos romper el silencio que se había formado en el pasillo, todos mirando al chico que en ese momento estaba dándolo todo en el hielo. El cabello rubio le daba un plus a su programa. Le hacía ver inocente y puro, como el blanco del vestuario que llevaba.
De un momento a otro, la presentación terminó. Aun cuando ya no estaba patinando, nadie habló en el pasillo durante unos segundos. Lo primero que rompió el silencio fue alguien que empezó a aplaudir suave y lentamente, dudoso. Poco a poco, todos nos fuimos añadiendo. Namjoon sacó su teléfono para grabar.
- Esto se lo tengo que enseñar o no me va a creer -dijo con una sonrisa.
Junto con los vítores de la pista, nuestros aplausos parecían pocos, pero en realidad sabía que serían los que más importancia tendrían para el rubio. Para él era importante tener el reconocimiento de sus compañeros y competidores, de gente como él que daba todo en el hielo.
- Es el mejor programa que ha patinado, sin duda -afirmé con una sonrisa-. Y la mejor presentación que ha hecho de este.
En el kiss and cry que estaban mostrando en la pantalla, se veía a Jimin con una gran sonrisa, más feliz de lo que lo había visto nunca. Miró atentamente todo lo que le mostraban en la pequeña pantalla que volvía a reproducir el programa que había ejecutado. Asentía cuando veía sus saltos, con una pequeña sonrisita.
Cuando llegó el momento de decir su puntuación, vi como cruzaba sus dedos.
- La puntuación para el patinador Park Jimin, representando a Corea del Sur, es de 114,54 puntos.
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Sobre Hielo - Kookmin
FanficDespués de acabar las competiciones, Jimin sabe que sus vacaciones van a ser cortas. Tampoco está muy contento de saber que alguien nuevo va a entrar al equipo. Menos aún cuando descubre que el chico es una completa distracción para él. Jungkook ad...