mentiras blancas.

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las espinas regresaron a las manos de willow, que se acercó a una boscha petrificada del terror, pero a la vez de la gratitud.

—quédate aquí.—le pidió willow a boscha, que literalmente no tenía otra opción—voy a llamar a viney para que te curen. vas a estar bien. sólo quédate aquí.

willow salió corriendo lo más rápido que pudo hacia la enfermería, que, para su asombro, era más grande de lo que podía imaginar. ahí, bo y viney conversaban y reían, pues, al nadie estar herido, no había nada mejor que hacer.

—¡VINEY! ¡BO! ¡BOSCHA! ¡AHORA!—gritó willow. con boscha se había hecho la fuerte, pues una persona no puede ayudar a alguien roto si ella está rota también. sin embargo, una vez lejos de ella, la bruja de lentes comenzó a desesperarse.

—¿ah?—ninguna de las dos chicas entendían nada, pero de sólo escuchar el nombre de boscha, automáticamente les dejó de importar lo que estuviera pasando. pero willow había defendido a la pelirosa por algo, y la salvaría cuantas veces fueran necesarias.

—¡SÓLO VENGAN!—las llevó a casi rastras hasta la cancha de grudgby.

boscha tenía las mangas de la casaca pintadas de sangre, las costras de los raspones de las mejillas salidas, el vendaje de su falta de piel simplemente desaparecido, y la vida escapándose de sus manos.

—¡mierda!—exclamó viney—¿qué le pasó?

—no hay tiempo de explicar...—dijo willow, recordando el sufrimiento, el discurso, y la poción—¡sólo tenemos que empezar a curarla antes de que pase algo peor!

bo tomó en sus brazos a boscha, sin importarle que chorreaba sangre por toda su ropa; en el aquelarre de curación, el asco no era una opción.

al llegar, la recostaron en una cama y hasta la tuvieron que entubar. estaba inconsciente por la pérdida de sangre, y habían posibilidades de temer lo peor.

—no puedes estar aquí. tenemos que hacer múltiples pociones y crear un polvillo antes de que boscha se desangre.—explicó bo— no hay tiempo y necesitamos espacio. tres son multitud, willow. regresa a clases ahora.

—pero-

—espera, bo.—interrumpió viney— está en el aquelarre de pociones. puede ayudar.

—¡exacto, puedo ayudar!

—de acuerdo, de acuerdo, pero escucha con atención; tienes que calmarte. si te equivocas en alguna de las pociones, todo estará perdido, ¿estamos?

willow asintió. la vida de boscha estaba en juego, y estaba decidida a salvarla a toda costa.

perdiendo tiempo libre, perdiendo clases, perdiendo calificaciones y perdiendo todo de más, las tres chicas se quedaron curando a boscha hasta altas horas de la noche.



luz: WILLOW PARK AMITY Y YO HEMOS ESTADO REVENTANDOTE EL TELÉFONO CON LLAMADAS
amity: DÓNDE CARAJOS ESTÁS
willow: no hay tiempo de explicar
willow: mis padres no tienen el teléfono de amity
willow: pero luz y gus
willow: si mis padres los llaman a preguntarles dónde estoy
willow: les dicen que me quedé a dormir con ustedes y que ya me quedé dormida
willow: lo más probable es que llamen a luz porque saben que gus no contestará porque duerme como una piedra
luz: está bien
luz: PERO DÓNDE ESTÁS
willow: no hay tiempo de explicar
willow: pero estoy bien


edward: ¿luz?
luz: señor park
luz: dígame
edward: saúl y yo estamos muy preocupados por willow
edward: van a ser las dos de la mañana y no ha llegado a casa
edward: ¿está contigo?
edward: por favor dime qué está contigo
luz: sí, se quedó a dormir aquí
luz: pensé que había avisado
luz: yo acabo de despertarme para tomar un vaso con agua, ella se durmió apenas llegó
edward: me quedo más tranquilo
edward: no sabe el castigo que le espera
luz: 😂
luz: no se preocupe, está conmigo
edward: bien
edward: disculpa la molestia, es que de verdad saúl y yo no hemos podido pegar el ojo en toda la noche
luz: comprendo
luz: no se preocupe
luz: buenas noches

luz suspiró. ni ella ni su novia habían podido dormir tampoco; ¿dónde podría estar? 

TranquilaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora