NARRA TODOROKI
Mientras me duchaba pensaba en lo que había pasado esta noche. Rescatamos al maldito Bakugou, pero su mirada no me gustó. Al verme su cara cambió a una más dura. Me pregunto que habrá pasado. Seguramente era mi última noche con Brooke. Un sentimiento amargo me inundó y apoyé la frente contra la pared mientras que el agua caía por mi cuerpo y soltaba un suspiro. De verdad estaba loco por ella.
"Te espero en mi cuarto" Joder. Esas cinco palabras habían conseguido erizarme la piel. Me imaginé qué sucedería después de esa frase si las circunstancias fuesen distintas. Noté como mi miembro empezaba a ponerse duro y paré de pensar en eso. Quería volver con ella cuanto antes, además las heridas me molestaban y necesitaba curarlas.
Entré en su cuarto y la vi con su pijama y su carita de sueño. Realmente era lo más bonito que había visto en mucho tiempo.
- Sácate la camiseta - me dijo mientras se acercaba a mi. Joder, Brooke.
NARRA BROOKE
Shoto se sacó la camiseta y pude ver un golpe en su costado. Además de su perfecto cuerpo esculpido por los mismísimos dioses. Brooke, concéntrate. Pasé las manos por su torso en busca de más heridas y noté su respiración en mi cabeza, Era bastante más alto que yo. Me di la vuelta y examiné su espalda. Solo tenía una raja pequeña causada por un roce. Pero tenía otras marcas. Iban desde los hombros hasta la mitad de la espalda. Como si una manada de gatos le hubiese arañado.
- ¿Y estas cicatrices? - le pregunté mientras las examinaba. Él soltó una risa ronca.
- ¿De verdad quieres saberlo? - Se giró hacia mi para mirarme.
- Sí. ¿Con qué animal te has peleado?
- Estas marcas me las dejan cuando no pueden soportalo.
- ¿Soportar el que? - se acercó a mi oído.
- El placer - me susurró y yo me estremecí. Al entenderlo me sonrojé. Esas cicatrices se las han hecho chicas con las que se ha acostado. Joder. ¿Tan bueno es?
El calor comenzaba a subir por mi rostro y no podía mirarlo. Cogí lo necesario para curarle las heridas y comencé. Tenía al chico más deseado de la UA en mi cama, sin camiseta y con una mirada que derretiría a cualquiera. Entonces me acordé de que sería la ultima vez que dormiríamos juntos y eso me llenó de tristeza. Realmente me había sentido muy bien con él. Deseaba ver a mi novio. Pero no quería simplemente dejar todas mis actividades con Shoto.
Mientras le curaba me contó que Katsuki estaba ahora mismo con sus padres y la policía. Que no podía mantener durante ese tiempo contacto con nadie de la UA para poder tomarle declaración y que volvería al día siguiente lo más seguro. Me contó como lo rescataron y como vivieron ellos la pelea.
- Ya estas listo, ahora vamos a dormir. Debes estar muerto de sueño.
- No paraba de pensar en que prefería estar contigo durmiendo a estar allí. Si eso resuelve tus dudas - yo le sonreí y me acosté, mirando hacía él.
Shoto me agarró por la cintura y me atrajo a él. Nos quedamos mirándonos en silencio unos minutos. Era realmente guapo. Y tenía una expresión tierna y relajada. La que siempre me mostraba a mi. Acaricié su mejilla con mi mano y él plantó un beso en mi frente.
- Te voy a echar mucho de menos, bicho - me susurró.
- Yo también idiota. Muchas gracias por todo - le abracé más fuerte y así nos quedamos dormidos.
Nos levantamos por la tarde para tirarnos a jugar a juegos de mesa y ver pelis en los sofás unos cuantos. Hicimos una cena sencilla y volvimos a acostarnos. Al día siguiente ya todos teníamos las pilas recargadas para volver a entrenar. Yo estaba nerviosa porque hoy nos dijeron que vendría Katsuki después de la cena. Me moría por verlo.
El día pasó lento y cuando por fin oímos la puerta de la academia todos corrimos a recibirlo. Sero, Kaminari, Mina y Kirishima fueron los primeros en tirarse encima de él.
- ¿Ah?¡Malditos extras!¡Quitaros de encima!¡Joder! - oír de nuevo su voz relajó todos mis músculos. Por fin estaba de vuelta. Cuando los chicos se apartaron lo vi.
Tenía varias heridas con vendas en el rosto y los brazos. Estaba un poco más delgado y tenía una expresión distinta en el rostro. Cuando logró localizarme el tiempo se paró unos segundos. Dejó de fruncir el ceño y me miró preocupado. Yo no pude contener la emoción y me lancé a sus brazos para abrazarlo. Él me recibió y me apretó contra él.
- ¿A ella si le dejas?¡Eso no es justo! - dijo Kaminari y Bakugou le lanzó una mirada asesina aún conmigo en sus brazos.
- Oe, los extras que vinieron a ayudarme. Atentos porque solo lo diré una maldita vez... Gracias... supongo.
Los demás asintieron y pude ver como la mirada de Todoroki había cambiado. Ahora estaba triste. Me dolía verlo así, después de todo lo que ha hecho por mi.
- ¿Quieres cenar algo?¿Quieres ducharte?¿Quier...
- Quiero encerrarme en mi puta habitación - dijo cortante y yo le miré preocupada - contigo.
Le ayudé a llevar sus maletas a su habitación. Todo el camino lo hicimos en silencio. Era un silencio tenso. Ninguno sabía que decir. Dejó las cosas a un lado y se sentó en la cama, apoyando los codos en sus piernas y enterrando la cabeza entre sus manos. Se le veía cansado.
- Katsuki... ¿Estas bien?
- No lo sé - respondió cortante - ¿cómo has estado? - preguntó mirándome serio.
- Bastante mal, he perdido peso y bastante entrenamiento. Tenía pesadillas constantes y estaba muy preocupada por ti.
- ¿Esos extras no te han ayudado?
- Bueno... - no sabía que tan buena idea era contarle mi relación actual con Todoroki. Pero después de casi perderlo decidí que no le ocultaría nada - Me han ayudado mucho, en especial Shoto.
- Shoto... - noté que apretaba su mandíbula y respiraba hondo - ¿Y que tal?
- Él me hacia las comidas y no me dejaba sola. Me ha ayudado mucho a poder comenzar una rutina como una persona normal estas semanas. Te echaba tanto de menos que no sabía que hacer - le dije triste y él relajó la expresión.
Se incorporó y se acercó a mi, apresándome entre sus brazos con fuerza, como si fuera a desaparecer en cualquier momento. Enterró su cabeza en mi hombro y aspiró mi aroma. Yo acaricié su pelo y pude notar que temblaba levemente. Al rato deshizo el abrazo, se sacó la ropa, se puso ropa cómoda y se acercó a mi.
- Vamos a dormir, fea. Estoy demasiado cansado.
Yo le seguí y nos tumbamos en la cama. Él se abrazó a mi y dejó su cabeza en mi pecho. Seguía temblando. No pude más y le pregunté.
- Katsuki, ¿que ha pasado? - no obtuve respuesta - ¿Te has encontrado con... él? - noté que temblaba más y se agarraba a mi mas fuerte, así que acaricié su cabeza de nuevo - ¿Puedes contarme que ha ocurrido?
- No quiero.
- Pero Katsuki... yo...
- ¡HE DICHO QUE NO QUIERO JODER! - su voz repentina me asustó y me estremecí - Maldita sea. Lo siento Brooke. No pienso hablar sobre lo que ha pasado ¿vale? Solo quiero olvidarlo, dejarlo atrás y relajarme mientras te abrazo. Como llevo soñando semanas hacer.
Yo lo entendí. Había pasado por algo horrible y no quería hablar de ello. Él seguía temblando. Me dolía ver lo que le habían hecho a mi novio. Y saber que no podía ayudarlo. Simplemente acaricié su pelo y dejé besos en su cabeza. Se sentía bien tenerlo de vuelta. Poco a poco él empezó a acariciar mi tripa y mi cintura, relajándose.
- Ya estas a salvo, mi amor. Todo va a estar bien. Yo estoy aquí - le dije esperando tranquilizarlo y lo conseguí. Katsuki me besó dulcemente y después se durmió abrazado a mi. A pesar de ser un chico duro era muy vulnerable en el fondo.
ESTÁS LEYENDO
¿Quieres jugar?
FanficMe llamo Brooke Shuzuki. Tenía que haber ingresado en la U.A hace un mes pero un desafortunado ataque lo impidió. Estoy aquí para convertirme en una heroína y huir de mi pasado, un pasado que cada vez me está pesando más. ¿Seré capaz de poder con to...