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¿Qué se supone que debía hacer en ese instante? Podía ir a la cocina y hablar con sus amigos y ayudarlos a apagar el humo que tenían por doquier, o podía simplemente sentarme en el sillón a esperarlo. De todas maneras tendría que convivir con ellos.

Me decidí por la cocina para poder hablar un poco más con ellos para que no piensen que no quería hablarles, o que simplemente quería evitarlos, a pesar de que era exactamente lo que quería hacer.

Me miraron de pies a cabeza y Jimin me sonrió.

Comencé a toser, el humo me llegó en toda la cara como si lo hubieran hecho a propósito porque comenzaron a reír divertidos.

—¿Qué ha pasado aquí?— pregunté.

Taehyung comenzó a echar aire con una revista para intentar disipar un poco el humo.

—Taehyung ha cocinado— musitó Hoserok— o al menos lo ha intentado y le ha salido de porquería como cada vez que lo intenta —reí divertido.

—En algo nos parecemos— le dije — soy pésimo cocinando... Claro que nunca he quemado una cocina.

—Suerte la tuya, Jeon —me dijo Taehyung levantando una ceja —¿A donde van a ir?— lo miré confundido mientras los otros chicos se empeñaban en apagar el humo y ni siquiera abrían las ventanas.

Me acerqué a ambas y las abrí, me miraron como si fuera un Dios de las ideas y Hoseok con Jimin y Namjoon decidieron salir a tomar aire.

Me quedé adentro con Taehyung.

Oh—oh, una conversación de lobo menor a lobo mayor. Eso podría significar un completo desastre a menos que intentara calmar las cosas.

Me miró, esperando que conteste.

—Comida tailandesa— musité.

—Ni se te ocurra— negó con la cabeza— es lo peor que podrías hacerle, la odia. Te recomiendo el parque, siempre me habló de su cita soñada. Compra brochetas de cordero y sobre todo no hagas bromas sobre nosotros —fruncí el ceño, ¿qué era eso? El chico que me odiaba dándome consejos para estar con su mejor amigo, ¿era o no lo que creía?

Quizás todo lo que me decía era falso. Quizás todo lo que me estaba diciendo era erróneo y a Yoongi le encantaba la comida tailandesa y los chistes de mal gusto sobre ellos y me estaba tomando el pelo porque en realidad su cita ideal era cualquier cosa que no se parezca a llevarlo al parque, o quizás, tan solo quizás yo estaba siendo demasiado paranoico.

—¿Puedo saber la razón, motivo o circunstancia por la cual me das consejos?— le pregunté.

Él suspiró frustrado.

—Si quieres no te digo más.

—Sabes que no es lo que he dicho —le miré —vamos, no necesitas comportarte como una "persona normal" —hice comillas con mis dedos— frente a mi. Sé exactamente que deseas ver a Yoongi con otra persona, excepto conmigo. Sé que me odias.

—Bien —se encogió de hombros y tomó asiento. El humo se había dispersado lo suficiente como para poder ver bien entre medio de todo—. Mira... vi como te miraba anoche, y por mucho que quiera que saques tu jodido trasero fuera de él— reímos— lo haces feliz, nunca lo había visto de esa manera. Sus ojos brillaban de una manera increíble que no podría describir en este instante —sonrió. Parecía que al empezar hablar de eso los ojos que brillaban eran los de él. Fijé mi mirada, su sonrisa se expandía de lado a lado, como si no solo estuviera encantado con Yoongi, sino más bien... Enamorado. Asentí —. Es por eso que si veo que una simple lágrima caiga de su rostro, eres hombre muerto.

—No quiero ser hombre muerto —reí.

—Más te vale —Minuto de silencio.

Nadie más habló, y de repente ya no pude contener más mi lengua. Contener las palabras no siempre ha sido lo mío y mucho menos cuando una de las dudas más grandes de las historia me está achacando. Me uní de valor esperando un enorme golpe en el rostro, pero se lo pregunté.

—Taehyung —me aclaré la garganta, —¿te gusta Yoongi?

¿Y tú, crees en la magia?  𓆩*𓆪 𝐾𝑂𝑂𝐾𝐺𝐼 𓆩*𓆪Donde viven las historias. Descúbrelo ahora