El imperio Diamante (jeongcheol x Seventeen) (Editando)

Capitulo 19

El día que nació el bebé, todos estaban eufóricos, todos menos el pobre Jeonghan que sufrió mucho para dar a luz. Era su primer nacimiento, así que era normal, pero no pensó que sería así. Los demás esperaron en la sala continua al dormitorio, Seungcheol no podía estarse quieto, igual que Hoshi y Mingyu. Dk parecía que se quedaría sin uñas y Jihoon ya iba por su tercera tasa de té. Wonwoo parecía tranquilo, pero no podía dejar de mirar la puerta y Joshua solo podía estar sentado y acariciar su panza ya más pronunciada. Jun fue el elegido por Jeonghan para acompañarlo, pensó que sería el más sereno de todos y en efecto fue de gran ayuda.
Después de un largo rato, oyeron el llanto de un bebé, Sonia abrió la puerta y se asomó para decirle al emperador:

- Felicitaciones majestad, ha nacido un hermoso príncipe.

Seungcheol casi cae desmayado, salió de la impresión y corrió al cuarto de al lado con todos siguiéndolo. Al entrar, vio a su esposo recostado, sosteniendo a su hijo en brazos.

- Hanni...

- Ven a verlo Cheol- dijo entendiéndole una mano. Seungcheol la tomó y se acercó.
Un pequeño niño, cubierto de mantas, moviendo sus pequeñas manitos y con sus ojos cerrados.

- Es hermoso...

- Seokmin ya para de llorar

- ¡Lo siento! ¡No puedo!- al pobre le corrían las lágrimas. Hoshi tomó su mejilla y lo guío para que se apoyará en su hombro. Él también se limpió una lágrima disimuladamente.

- ¿Escogieron un nombre?- preguntó Joshua apoyándose en Wonu.

- Si, se llamará Yongqi

- El príncipe Yongqi

- Larga vida al príncipe heredero- dijo Caratina, entonces todo fue silencio, Jeonghan vio cómo su madre la regaló con una seña.

- ¿Porqué no dejamos a la pareja con el pequeño? Jeonghan tiene que descansar- dijo Jun haciendo que todos salieran uno tras otro prometiendo volver pronto y traerle a Jeonghan dulces y regalos para consentirlo.

Una vez solos Seungcheol tomó a su bebé en brazos y comenzó a mecerlo.

- ¿Quieres nombrarlo príncipe heredero?

- ¿Tu quieres que lo sea Hanni?

- Si te digo que no... ¿Te enfadarías conmigo?

- Claro que no amor, sé porqué lo dices y yo pienso igual

- ¿De verdad?- Cheol asintió.

Si, Seungcheol no quería eso para su hijo, ni para ninguno de sus hijos o hijas en el futuro. Él vivió con el peso de ese título sobre sus hombros toda su vida, nadie alguna vez le dijo que había deshonrado su posición, pero ¿Qué hubiera pasado si así fuera? No quiere forzar a ninguno de sus hijos a tener que vivir pensando en lo perfectos que deben ser en el futuro. Cuando todos hayan crecido y viera cual de ellos era el mejor para ocupar el puesto de Emperador, entonces lo nombraría príncipe o princesa heredera. Antes de eso podían dedicarse a ser solo niños.

La noticia del nacimiento dio vuelta por todos los reinos, el pueblo celebró la llegada del nuevo príncipe por tres días. Regalos y cartas llegaron en montones desde todas partes. Los padres de Jeonghan y su hermana se dieron el tiempo de ir a conocer a su nuevo nieto y sobrino, como parte de la familia de la Emperatriz tenían el derecho de hacer una visita.

La vida parecía ser perfecta, Jeonghan volvió a su papel de jefe del harén dándole a sus consortes un descanso y una oportunidad de mimar a su hijo mientras él estaba ocupado. Procuró no excederse, no sólo porque ahora era padre, sino que además porque no volvería a saturarse de trabajo como pasó hace tiempo. Había hecho una promesa con Seungcheol respecto a eso.