MI BELLO Y FRÍO ANGEL

capitulo 4

La fiesta comenzó todos se divertían por ese momento Wei Ying pudo olvidar lo que pasaba y convivio con su familia como si nada, hasta que llegó la noche ya acheng había tomado demasiado al igual que su amada Shijie y Madam Yu asi que decidió que ya era hora de llevarlos a descansar.

Comenzó a llevar de uno por uno ala cabaña hasta que al final se fue ala sala y ahi se dio cuenta de que se quedó de nuevo solo con su tío, el pánico se apoderó de él asi que esté corrió hacia su habitación y cerro la puerta.
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Cuando entro se recostó sobre la puerta tratando de estabilizar su respiración pues se sentía tan desesperado, cuando lo logro se fue hacia su cama y se recostó trato de cerrar los ojos pero derrepente sintió un cuerpo sobre el de el el cual con una mano le tapaba la boca y con la otra sujetaba sus manos, en su mente solo podía repetirse que era una pesadilla una y otra vez que tenía que despertar y todo se acabaría pero su miedo fue  en aumento cuando se dio cuenta de que no lo era, no estába soñando era real su tío estaba sobre el, su respiración podía sentirla sobre el y lo estaba tocando de nuevo y está vez no solo respiraba sobre su cuello si no tambien lo lamia, lágrimas empezaron a correr por sus mejillas la desesperación creció en el.

-----Mi niño eres tan hermoso como ella, por favor se un buen niño y no grites no quieres que todos se enteren de nuestros juegos verdad.

Su tío le quitó la mano de su boca después de decirle eso en el oído, pero aunque el quisiera gritar el pánico era tan grande que ni siquiera su voz salía, derrepente su tío con una mano se adentro bajo su camisa y comenzaba a tocarlo después comenzo a deslizarla hacia abajo de su vientre y al sentir como su tío desabrochaba su pantalón su frustración fue aún más su miedo creció pero este mismo le dio el valor pues aún no podía gritar pero si moverse y con todas su fuerzas le dio una patada a su tío en sus parte y lo aventó lejos, el aprovecho y salió corriendo fuera de la cabaña.

Corrió lo más que pudo hasta perder las fuerzas, sus ojos estaban llenos de lágrimas aún no podía ni siquiera hablar, solo se dejó caer junto aún árbol y lloro hasta que el cansancio lo venció quedándose dormido.

Al despertar tenía frío y estaba confundido derrepente recordó todo lo que había pasado por la noches y sus lágrimas volvieron a parecer, el no quería regresar a casa sabía que si regresaba su tío volvería a tocarlo y si esta vez tubo suerte y pudo escapar quizás la próxima no la tendría hasi que decidió que se olvidaría de su familia y comenzaría de nuevo después de todo no seria la primera vez que le tocará bagar por las calles y alimentarse de basura preferiría eso a ser tocado de nuevo por quién el creyó y quiso como a un padre, aun que sabía que su familia se preocuparía por su desaparición pero era mejor asi a qué supieran el clase de monstruo que tenían junto a ellos.

Mientras tanto en la cabaña todos se despertaron con resaca, ninguno vio a Wey Ying por ningún lado asi que creyeron que seguía durmiendo, todos desayunaron y más tarde ya se les hizo raro que no bajara y acheng subió a ver qué era lo que pasaba.

-----Wei ying ya es muy tarde despierta saldremos a dar un paseo. (asi estuvo por un tiempo y nunca recibió respuesta asi que decidio entrar y al hacerlo no encontró a nadie)

----Madre, Padre Wei Ying no esta en su habitación y al parecer ni siquiera durmió aquí.

Mándame Yu se preocupo, shijie  también, su padre decidió hablar para no parecer sospechoso.

----A noche el los trajo a todos ustedes, después se quedó solo aquí en la sala, yo subí a dormir y no se que paso después.

Todos decidieron esperar un rato quizás solo se despertó temprano y decidió salir a caminar.

Pero las horas pasaron y no sabían nada de Wei Ying, asi que llamaron a la policía para que comenzarán a buscarlo, pero fue inútil, pues  no lo encontraron y tuvieron que volver a su casa, todos iban en vueltos en una aura de tristeza pues se supone que sería un viaje para convivir en familia y que habían logrado solo perder a su hermano y regresar a casa sin el.