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Estando ya libre Erik y sin más clases por dar, se dirigió al despacho de Charles buscando poder estar al fin con él, no lo esperaba así, pero realmente las clases le dejaban sin apenas tiempo para pasar tiempo con su novio. Llegó pensando en los repentinos encuentros que tuvo con su antiguo "amigo" con el cual no se llevó muy bien las veces que coincidió con él y en cómo sería que estaba allí.

-Es tan hermoso ver como el océano pasea por una llanura de textos incomprensibles-

Dijo de pronto el mayor entrando al despacho del telépata llamándole la atención y sonriendo ladino viendo el leve sonrojo de Charles al escucharle.

-No son tan incomprensibles... Eres adorable-

Levantó la mirada antes de contestar para poder echarse para atrás fingiendo distracción tras sus palabras y conectar la mirada a la de su novio, no antes de recorrer su cuerpo entero con los ojos , perdiéndose en su mirada cristalina, tan hermosa como una lluvia de diamantes salpicando en el mar con el reflejo del sol de una tarde en ocasiones de verano, y otras de invierno, pero siempre preciosa, así era como mil veces había descrito oral y mentalmente sus ojos y su mirada, porque le mirara como le mirara, siempre era así de cautivadora y deslumbrante, y ¿cómo no iba a perderse en su mirada, si se acercaba cada vez más y así era como mejor podía observarla? Pues así habría seguido si no le hubiese interrumpido sacándole de sus pensamientos cuando empezó a hablar.

-No es así como suelen describirme. ¿Filosofía?-

-¿Qué? Ah, si, no es tan complicado, solo que... no lograba centrarme-

-¿De nuevo distraído, profesor? Son los alumnos quienes estudian, no tú-

Se encaminó hacia detrás de su silla mientras hablaba, agachándose quedando a la altura de su cabeza, posando las manos en sus hombros y terminando la frase cerca de su oído.

-Estaba preparando mi clase para mañana-

-Pues si estás ocupado me voy-

-Ni se te ocurra-

-Está bien, no lo haré-

Antes de contestar soltó una leve risa ante la anticipada respuesta de Charles y se separó después de dejarle un corto beso en la nuca, empezando a deambular por la habitación sin dejar de mirar a el que estaba sentado delante suya, hasta que las imágenes de Logan caminando por la escuela sin separarse de uno de los estudiantes, con el cual recordaba tener una conversación pendiente, volvieron a su mente.

-He visto a Logan por los pasillos al lado de Peter-

-Si, según Peter se lo ha encontrado en el bosque y ha llegado con él como un niño que se encuentra a un perro en la calle, me ha dicho "¿nos lo podemos quedar?" ¿Y cómo negárselo?-

-Bueno, seguro que será una buena mascota-

-Exáctamente lo mismo ha dicho Peter, es que no cabe duda-

Comentó Charles sin ser consciente de lo que estaba diciendo, dándose cuenta al ver la cara de confusión de Erik, en ocasiones le fastidiaba el saber cada pensamiento y secreto de todo el mundo, en varias ocasiones sin ser su intención, pero la gente tiene la mala costumbre de pensar demasiado alto, o eso ponía él mismo como excusa.

-¿De qué?-

-¿De qué? De nada, decía que no cabe duda de que no te gusta demasiado Logan-

-Tienes razón, aunque no sé si creerte, suenas sospechoso...-

-Deliras, cielo, creo que estás muy saturado con las clases, deberías relajarte más-

-Te creeré... Hablando de Peter, antes ha venido a hablar conmigo, parecía importarle, ¿le has motivado con algo para llevar mejor sus clases?-

-No, no es de eso de lo que te hablará, ten paciencia-

-En fin... ¿te parece algo realmente importante?-

-Mucho-

-Pues dímelo ya y me liberas de la intriga-

-No, no puedo, es algo que tendrá que contarte él mismo-

-Si que suena serio...-

Quería contárselo, si, pero más que nada para despreocupar a su novio, se veía pensativo intentando adivinar que sería lo que debía contarle el chico, pero no podía, Peter le pidió que no le dejara saber nada del tema, quería contárselo exclusivamente él, ya que es su hijo, y decidió hacerlo así. No le diría nada a Erik.

De vuelta a casa. Cherik/ X-menDonde viven las historias. Descúbrelo ahora