Fui hecho para amarte

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"Not even they can stop me now
Boy, I'll be flying overhead
Their heavy words can't bring me down
Boy I've been raised from the dead

No one even knows how hard life was
I don't even think about it now because
I've finally found you
Oh, sing it to me

Now my life is sweet like cinnamon
Like a fucking dream I'm living in
Baby love me cause I'm playing on the radio
(How do you like me now?)

Pick me up and take me like a vitamin
'Cause my body's sweet like sugar venom oh yeah
Baby love me cause I'm playing on the radio
(How do you like me now?)"
Radio - Lana Del Rey

Narra Emily

Ella me abrazo y Will se subió un poco sobre mi, Tom me abrazo por la cintura dejando besos en mi mejilla.

Por fin era febrero, iríamos a la ceremonia de la asociación de Artes. Me estaba vistiendo, usaría un vestido rojo y él estaba usando un traje azul muy lindo.

Mi celular comenzó a sonar y eran mensajes de Sebastian.

— Dice Sebastian que ya no hay lugares en el estacionamiento - hablé mientras él se ponía su reloj -

— Hmm - me miro -

— Tal vez podamos ir en taxi - hablé y me gire a verlo - y dice que él puede traernos de regreso.

— Bien - sonrió -

Salimos de la habitación y llevamos los niños con Scarlett, ella los cuidaria, salimos del edificio y esperamos un taxi.

Durante el camino íbamos en silencio y yo veía por la ventana.

— El jueves es tu cumpleaños - gire a verlo -

— Oh si - sonrió -

— ¿Quieres hacer algo?

— Me gustaría una cena solo nosotros y los niños.

— Bien - asentí - preparare algo especial.

Llegamos a la ceremonia y Sebastian tenía razón, habían demasiados autos estacionados era un evento muy grande.

Entramos y caminamos entre las personas, Tom me tenía sujetada de la mano entrelazando nuestros dedos. Nos encontramos a Sebastian junto a otras personas, nos acercamos a él y me abrazo por la cintura dándome un beso en la mejilla.

Durante la ceremonia agradecieron a Tom, Sebastia y Benedict por ser socios de la fundación. Estuvo bien la fiesta, muy tranquila y estuvimos hablando de cualquier tema que se nos cruzara por la mente.

— ¿Qué tal si usted señorita Hiddleston y yo - Tom me abrazo por detrás y por la cintura - nos vamos de aquí y aprovechamos la noche?

— Es necesario más qué un simple roce para convencerme - pase mis manos por las suyas - señor Hiddleston.

— ¿Qué sugiere? - susurró en mi cuello y dejó pequeños besos - ¿esto?

— Tal vez.

— Cariño no quiero descansar esta noche, mañana podemos hacerlo tal vez pero hoy - me hizo dar una vuelta y mirarme a los ojos - hoy te aseguró que no vamos a descansar, y con ese vestido Emily - rozó mis labios con los de él - te ves jodidamente perfecta.

— Salgamos de aquí - sonreí -

— Bien dicho.

Nos despedimos de todos, le dijimos a Sebastian que tomaríamos un taxi y que no tenía nada de que preocuparse.

Susurros del corazón Donde viven las historias. Descúbrelo ahora